Algeciras CF

La afición del Algeciras CF no ve llegar, con dos derrotas seguidas, la salvación

Tomás y Juan Rodríguez conversan tras la derrota contra el Murcia

Tomás y Juan Rodríguez conversan tras la derrota contra el Murcia / Erasmo Fenoy

La cuestión es llegar a cuarenta y cinco puntos, un listón accesible a partir del que asegurar la permanencia del Algeciras CF, una temporada más, en Primera Federación. Pero la expectativa generada hace cerca de un mes, la de aspirar a pelear por el play-off de ascenso a Segunda División, se diluye como un azucarillo en vaso de leche.

El Real Murcia hizo el pasado domingo lo que el Ceuta consiguió una semana antes, ganarle al Algeciras, con diferente planteamiento, salvo excepciones, y con distinto tanteo. Sea como fuere, el equipo de Lolo Escobar suma dos derrotas consecutivas, y el próximo sábado (16:00) viaja a Mérida, un equipo que marca el borde entre la tranquilidad de la estancia en la categoría y el nerviosismo del abismo.

El Algeciras le ganó al Linares en el minuto 95, un triunfo que por su forma y su significado desató la locura, y luego empató, siete días después, con el poderoso Málaga en un partido disfrutado más que sufrido por los aficionados que casi llenaron el Nuevo Mirador. A partir de ahí, y siguiendo las declaraciones del entrenador algecirista, se dispararon las expectativas. Fueron aquellas ruedas de prensa en las que dijo que "al Algeciras le quedan muchas cosas buenas por hacer" y "como hemos estado, es posible todo".

Bien es verdad que Escobar no ha dejado de repetir que el objetivo principal eran los cuarenta y cinco puntos, pero los resultados llevan muchas veces a la tentación de subirse a la ola grande que parece que terminará en la orilla de la isla mágica, pero para llegar hay que remar sin desmayo. El Ceuta, primero, y el pasado domingo el Murcia, han puesto al Algeciras en otro lugar.

Ambos partidos estaban marcados por la misma cuestión. Un triunfo enganchaba a los algeciristas con la pelea entre los mejores, y una derrota suponía que el rival de turno ponía distancia de por medio en el peor momento posible, cuando un equipo encara la recta final del campeonato.

Si se observa lo que queda por disputar, el Nuevo Mirador aparece como el mejor y más idóneo escenario para conseguir la permanencia, pero queda por enfrentarse en casa al Antequera, Atlético Baleares y Castellón. Las salidas, además de la del próximo sábado a Mérida, serán al campo del Atlético Madrid B, al Nuevo Colombino de Huelva y al Arcángel de Córdoba. Basta ver la dinámica de juego y resultados de todos los equipos para certificar que no es tarea fácil. Eso demuestra que la Primera División, es cierto, es una categoría muy igualada y competida.

El Algeciras CF ocupa ahora la décima plaza, la que marca el ecuador del grupo II. Es la zona templada, la del ni frio ni calor. Nadie puede discutir que la temporada está siendo buena, que tener siete oportunidades de sumar tres puntos es un margen amplio, muy amplio, tanto como el que media entre los que tiene el Algeciras (42), y los que tiene el San Fernando (34), ahora en descenso. 

La próxima cita en tierras extremeñas es una nueva ocasión de reivindicarse como plantilla y poner broche a la trayectoria tras dos reveses seguidos.

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