Lo de la Educación es el mundo del revés, no tenemos una política que prevea sino constataciones de errores y a parchear; la Educación es un reflejo de la sociedad que vivimos, y el brillo, la moderación, el trabajo sistemático, la acumulación de conocimiento, la lectura, la tolerancia y el pensamiento crítico (por analogía) no son las características de nuestra Cultura.

Llevamos años incrementando las formas de control sobre un profesorado harto que sabe que todas esas técnicas pedagógicas cuantificables son una reverenda gilipollez, sin más utilidad que la de fingir el desarrollo de un proceso que no se está produciendo. Si el alumnado después de la Primaria y buena parte de la Secundaria no sabe nada de idiomas, no entiende las Matemáticas, sigue pensando que Dios creó el mundo y no sabe leer ni escribir (y esto es literal, lo vivo), es que falla todo; sí, el profesorado, también, pero sin olvidar que lo hemos fabricado para la gloria de los legisladores: aguanta en clase, intenta hacer algo no polémico, aprueba a todo el mundo y rellena papeles para justificar, no importa que no enseñes nada, no le importa a nadie, el aprobado no se revisa, se ataca a quien suspende, cobra.

En un centro educativo no se debe enseñar lo que hay que saber, eso es absurdo y totalitario; se prepara al personal para que pueda dedicar el resto de su vida a aprender en un proceso que no acaba nunca, a despertar la curiosidad, y por eso ha de ser subversivo, poniendo en duda hasta el propio Sistema Educativo y el papel de las familias, no debe enseñar la tradición (está en lo diario) sino su análisis, debe respetar los valores en los grupos sociales criticándolos, ofreciendo siempre una alternativa a un alumnado que debe salir cada día con el ansia pragmática de saber más, del porqué, con consciencia histórica de su situación (¿mundo laboral?, ¡será que debemos prepararnos para no abusar ni ser abusados en el mundo laboral!), vivir diferente.

¿Recuerdan eso de adoctrinar? Pues ésa es clave, adoctrinar en el método científico, el rigor, el estudio de la Historia entendida como investigación (como indica su etimología) para poder entender y opinar, comprender para..., leer para..., calcular para..., observar para..., analizar para..., erudición para...

Porque yo paso el medio siglo de vida y no sé nada, nada tengo qué enseñar, doy por hecho nada y cada día, empero, tengo la misma ilusión por la Música, la Pintura, la Literatura, la misma curiosidad por el cerebro, la evolución, la sociedad, la estructura de la materia, la Política (noble), la Justicia, el Derecho, los misterios del comportamiento humano... y entro clase sin saber qué coño les voy a decir a estos paupérrimos autómatas de los móviles que les pudiere servir para despertarlos del sueño infame de la tecnología, en favor de sus cuerpos y sus sentidos, lejos de los valores decadentes de la mierda de Sistema que los fagocita para engordar a unos cuantos.