Crisis Sanitaria

La complicada vuelta al trabajo en el Campo de Gibraltar en medio del coronavirus

  • Sindicatos y empresarios consideran inoportuno el reinicio de la actividad laboral en las empresas no esenciales decretado por el Gobierno 

  • Dudan de que las pequeñas industrias y las constructoras tengan capacidad para aplicar las medidas de seguridad recomendadas

Dos trabajadores de la construcción, este lunes en La Línea.

Dos trabajadores de la construcción, este lunes en La Línea. / Erasmo Fenoy

Los trabajadores y empresarios de la construcción y de la pequeña industria del Campo de Gibraltar regresan este lunes al trabajo tras dos semanas de hibernación de la economía y lo hacen cargados de dudas y preocupaciones. Así al menos lo detectan los secretarios comarcales de CCOO y UGT, Manuel Triano y Ángel Serrano, así como el presidente del Consejo Territorial de la Confederación de Empresarios de la provincia de Cádiz (CEC) en el Campo de Gibraltar, Francisco Arroyal. Los tres coinciden en que se trata de un regreso "complicado" en la que se producen muchos conflictos difíciles de controlar. 

Después de cumplido el periodo en el que el Gobierno central había ordenado la suspensión de toda actividad no esencial, que en la practica se ha visto prolongado unos días por la Semana Santa, miles de campogibraltareños se han visto obligados a volver a la calle para acudir a sus puestos de trabajo y se han encontrado, a juicio de los sindicatos, con que las recomendaciones propuestas por el Ejecutivo son difícilmente aplicables.

Mientras que las grandes industrias, empresas del Puerto de Algeciras y otras que también desarrollan actividades esenciales en su mayoría, llevaron a cabo hace semanas la adaptación a las exigencias, para lo que pusieron en marcha toda su capacidad, las medidas indicadas para hacer frente al coronavirus han pillado a muchas pequeñas contratas y a las obras con escasas posibilidades de llevarlas a cabo en tan poco tiempo. Y en cualquier caso, las opciones de velar por el cumplimiento son igualmente exiguas.   

Manuel Triano afirma que lleva toda la mañana del lunes contestando a las dudas telefónicas de los trabajadores y le preocupa especialmente "los centros de trabajo pequeños" donde se le plantee a los empleados que elijan "entre la salud y el salario". "Pedimos que la reincorporación se realice de la misma manera que estaba hace dos semanas, que los protocolos se cumplan y que los planes que han desarrollado las grandes empresas se apliquen también en las contratas", explica el secretario comarcal de CCOO.

A Triano le preocupa especialmente el sector de la construcción, especialmente "precario" en cuanto a derechos de los trabajadores, donde afirma que se produjeron "muchos despidos" cuando se decretó el confinamiento y ahora el reinicio de la actividad se dificulta en algunos casos por la necesidad de algunas constructoras de cumplir con fechas de fin de obra previstas.

Ángel Serrano es muy crítico con la decisión del Gobierno de reanudar los trabajos no esenciales. "Si no son fundamentales ¿qué hacen en la calle?", se pregunta el secretario comarcal de UGT, al que no le parece razonable que haya "dos hombres haciendo un acerado" en medio de una crisis sanitaria sin precedentes. "La ruina ya está servida. ¿Por qué tanta prisa? Les estamos diciendo a los ciudadanos que se queden en casa y, de repente, tienen que volver al trabajo con el riesgo de esparcir un virus peligrosísimo. ¿Tan importante es terminar un edificio que no puede esperar a dentro de un mes?", continúa.

Un repartidor, este lunes en La Línea Un repartidor, este lunes en La Línea

Un repartidor, este lunes en La Línea / Erasmo Fenoy

Serrano afirma que las grandes industrias y las empresas esenciales del Puerto de Algeciras lo tienen "controlado" pero al resto, a los que tienen que volver este lunes, les es difícil cumplir con las recomendaciones del Gobierno. Muchas veces los equipos de protección perjudican al trabajo y en tareas hace falta una mascarilla y en otras es imposible, pero es muy importante un gel desinfectante. ¿Cómo se controla eso? No sabemos realmente quiénes se incorporan y cómo. Creo que no es el momento de haber tomado esta medida, pero no sé por qué no han esperado", concluye.

Francisco Arroyal considera que es una vuelta al trabajo "complicada" para los empresarios, a los que genera mucha "inseguridad". "Tenemos la obligación de retomar la actividad pero desde el Gobierno se estiman unas medidas mínimas que muchas empresas no tienen posibilidad de cumplir para arrancar", subraya.

"Hay muchas empresas que no puede permitirse el lujo de hacer las inversiones que requiere retomar sus negocios, y sobre todo después de dos semanas sin actividad, con ingresos a cero", continúa el también vicepresidente de la Cámara de Comercio del Campo de Gibraltar, que advierte: "porque dentro de unas semanas vendrá la segunda parte, cuando las empresas empiecen a tener verdaderos problemas económicos después de este parón". 

A Arroyal se le nota preocupado por todos los sectores, pero especialmente la hostelería, que está perdiendo "un volumen de clientes" enorme "hasta el punto de que muchos dicen que el 2020 está perdido". "Tenemos anulaciones hasta septiembre y eso no se va a recuperar por muchos que todos los españoles nos pongamos a darle actividad cuando termine el estado de alarma. No tenemos capacidad nacional para cubrir la pérdida que supone el que no vengan los clientes de fuera del país", concluye.  

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios