Los colectivos ecologistas Agaden y Verdemar han denunciado ante la Fiscalía de Medio Ambiente del Campo de Gibraltar, que la Estación Depuradora de Aguas Residuales del municipio de San Roque, no esta depurando correctamente las aguas fecales del municipio ni cumpliendo los parámetros legales que marca la legislación.

Los ecologistas, a través de la Dirección General de Planificación y Recursos hídricos de la Consejería de la Junta de Andalucía de Agricultura, Pesca, Ganadería y Desarrollo Sostenible, han tenido acceso a los análisis de salida de aguas fecales vertidas por dicha depuradora, "observándose en los mismos que los parámetros de vertido de esta depuradora al arroyo Madrevieja, durante todo el año 2019, superan notablemente y de forma constante los establecidos en el RD 11/1995".

"Actualmente el arroyo Madrevieja presenta muy mal aspecto medioambiental y se encuentra en un estado avanzado de eutrofización, siendo un cauce muerto donde no se puede apreciar la presencia de peces ni anfibios típicos de este tipo de arroyos en la zona. Sus aguas presentan un color grisáceo y un fuerte olor característico de aguas fecales sin depurar, prueba de que las cosas no marchan bien en esta depuradora, algo que viene a demostrar con datos, dichas analíticas. Si embargo, ni las autoridades ambientales locales ni autonómicas han realizado ninguna actuación o medida para poner fin a la mala depuración y evitar la degradación del lugar", explican en una nota.

"La mala gestión de las depuradoras ha hecho pagar a España más de 32,7 millones de euros a la Unión Europea, que contemplaba una multa fija y penalizaciones semestrales mientras perduren los incumplimientos de la normativa comunitaria; suponiendo este caso la mayor sanción que el país ha tenido que pagar nunca a Bruselas", continúan.

"Actualmente España tiene abiertos cinco procesos de infracción europeos por falta de tratamiento de las aguas urbanas en este momento. En total, esos cinco expedientes conciernen a casi 1.100 aglomeraciones urbanas, según detallan fuentes de la Comisión Europea, y el campo de Gibraltar tiene responsabilidad en estos incumplimientos", apostillan.

Junto a los daños ambientales, los ecologistas entienden que "no debe tampoco ignorarse la situación de emergencia sanitaria que estamos padeciendo por la covid-19. Recordemos que el pasado mes de julio, el Seprona de la Guardia Civil encontró presencia de coronavirus en aguas residuales que se vierten al río Manzanares, en el municipio de Getafe. Por lo que en este caso podría suceder algo similar".

Desde el movimiento ecologista afirman que van a seguir trabajando para poner fin al caos medioambiental en materia de aguas fecales, sin depurar o mal depuradas, a través de cauces judiciales y administrativos.