Se lanzan al vacío, abren el paracaídas y, tras tomar tierra, se buscan la vida. En su caso, a base sensacionalismo y falsedades: "Los niños crecen acostumbrados a oír los disparos", arrancaba una crónica realizada para los informativos por una televisión nacional desde La Línea. Y según un periódico, "al Zabal solo entran los propios vecinos, consumidores y agentes de la Policía Nacional". Ese barrio, añade, al igual que La Atunara o San Bernabé, son "guetos más parecidos a las favelas de Brasil que a cualquier otro conocido en España".

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