La Casa de la Juventud de La Línea ha acogido la jornada inaugural del Programa de Intervención para agresores de violencia de género en medidas alternativas (Priama). Al acto acudieron la concejal de Igualdad y Asuntos Sociales, Zuleica Molina, y la directora del Centro de Inserción Social Manuel Montesinos, Ana Hontana, junto a técnicos de ambas entidades.

En su tercera edición cuenta con 14 participantes residentes en La Línea que acudirán al resto de sesiones en las aulas Virgen del Carmen, en la Atunara. Los objetivos del Priama son erradicar las conductas violentas y reducir el nivel de reincidencia de los participantes, modificar aquellos factores de riesgo dinámicos señalados como relevantes en los delincuentes de género, facilitar la adherencia y receptividad al tratamiento por parte de los participantes mediante un enfoque positivo e introducir mejoras de tipo psicológico.

El Ayuntamiento de La Línea se ofreció en 2020 desarrollar estos programas en la ciudad con el objetivo de posibilitar la conciliación laboral de aquellas personas cuyo traslado a Algeciras supone pérdida de tiempo, recursos económicos y de horas efectivas de trabajo.

En la inauguración de esta tercera edición, Molina dirigió unas palabras a los asistentes y mantuvo con ellos un intercambio de opiniones sobre el aprovechamiento del programa, una experiencia que resulto ser “muy enriquecedora.” La edil considera que la colaboración institucional es “crucial” para el desarrollo de las iniciativas sociales, pues permite un acceso con mayor alcance y profundidad social al colectivo que necesita estas intervenciones. Por ello, “las soluciones deben venir de la mano de diferentes organismos protagonistas en los aspectos de prevención e intervención social”, manifestó.

Zuleica Molina destacó así el esfuerzo y dedicación que los psicólogos de Servicios Sociales, Gemma Casado, y Gabriel García, como responsable de este programa, aportan para el desarrollo del mismo. “Sin duda, se trata de un poderoso instrumento de crecimiento y desarrollo personal que, lejos de victimizar o señalar culpables, trabaja sobre la base de la posibilidad del cambio personal y en las propias destrezas individuales”, señaló.

Con una duración de entre ocho y 10 meses, durante dos horas semanales se realizan sesiones presenciales en formato grupal e individual según la etapa. La primera es de motivación y evaluación, la segunda de intervención, en la que se abordan aspectos como inteligencias emocional, autoestima, autocontrol y gestión de la ira, etc., con una última fase de seguimiento para evaluar los cambios.

Priama es fruto del convenio de colaboración firmado el pasado marzo entre Instituciones Penitenciarias y el Ayuntamiento de La Línea para intervenir con aquellas personas que, como medida penal alternativa, realizan un programa contra la violencia de género. Tiene un enfoque integral, con un marcado carácter práctico, y cumple los criterios de calidad europeos sobre la intervención en violencia de género.