Con 30 puntos en el casillero, se puede decir que el Algeciras CF ha completado dos tercios del camino hacia el objetivo de la permanencia en la Primera Federación. El sufrido y poco lustroso triunfo del pasado domingo ante el Melilla rellenó el tanque de la gasolina para un equipo que ha logrado empezar de la mejor manera la segunda vuelta del campeonato y que tiene 18 jornadas por delante para alcanzar su meta con holgura.

El Algeciras por fin recuperó la sonrisa en 2024 y devolvió un poco la normalidad a su día a día. La victoria contra el penúltimo no fue para tirar cohetes porque es obvio que el conjunto de Lolo Escobar no atraviesa por un buen momento, pero anímicamente sí supuso quitar una gran losa de encima a un vestuario que estaba pagando los agobios lógicos de verse con tres derrotas seguidas en el tramo más duro del calendario.

El Algeciras de Lolo Escobar tiene por delante todavía tarea para llegar a la tierra prometida, pero afronta la segunda parte de la liga en una situación envidiable. Los rojiblancos aumentaron su colchón sobre el descenso a 13 puntos, una distancia considerable que debe otorgar tranquilidad a todo el entorno y que abre el margen de error. Por arriba, los de Escobar se acercaron a la quinta plaza, a cinco puntos, tras el empate del Recre en casa con el Córdoba de Iván Ania. Una diferencia salvable.

Sin embargo, después de lo vivido entre finales de diciembre y primeros de enero, buena parte del algecirismo ha optado por centrar el tiro a conseguir cuanto antes la permanencia. Son muchos los seguidores que coinciden con los dirigentes en que lo primordial es no volver a pasar los apuros de la pasada temporada cuando el Algeciras padeció una auténtica agonía para salvarse en la última semana.

Una vez que el reciente bache ha puesto en cierta medida al Algeciras en un sitio, Lolo Escobar y sus pupilos se han vuelto a agarrar con fuerza al mensaje de alcanzar los 45 puntos de la tranquilidad y luego, a disfrutar de lo que quede. Quien dice 45, dice 47 o 48, pero por ahí ronda el número mágico que sella el pasaporte para continuar en la tercera categoría del fútbol español. Da la sensación, viendo el ritmo de los cinco de abajo, que con 45 debe bastar.

No se trata de que el Algeciras renuncie ya al sueño de pelear por el play-off de ascenso. Ni mucho menos. Sin embargo, la realidad es que a los rojiblancos les ha ido mejor cuando marchaban de tapadillos. Cumplida la primera vuelta, los que están ahí ya no pueden camuflarse demasiado, por lo que equipos como el Algeciras, el Antequera, el Intercity, el reforzado Ceuta y alguno más están autorizados a presentar las credenciales por una puja que ahora mismo permite mirar a las posiciones quinta y cuarta porque el Málaga se ha deshinchado como un globo pinchado.

Como dijo Lolo Escobar, nadie sabe en qué momento se puede estancar un equipo durante una temporada. El último empujón hasta los 30 puntos se indigestó en La Menacha. Ahora, el equipo encara el tramo de los 30 a los 40, el que acerca muy mucho la salvación. Las cuentas redondas aputan a cinco victorias más en las 18 jornadas restantes, un reto que no debería representar un problema para un Algeciras que en la primera vuelta conquistó siete victorias. Si los rojiblancos cumplen en el Nuevo Mirador y pegan algún que zarpazo fuera de casa, se ganarán el derecho a pelear por el quinto puesto a partir de marzo, que es cuando llega la hora de la verdad para todos.