Emulando al primer equipos, que el viernes durmió colíder de Primera, el Cádiz B recibe este domingo (12:00) a la Real Balompédica afincado en lo más alto de la clasificación de su grupo y, como los de La Línea, sin haber recibido un solo gol. Los amarillos afrontan la contienda con la baja del mauritano Idrissa, aún inédito en esta andadura, y con un once que, se supone, será idéntico al que comenzó la pasada semana en San Fernando. El partido, para desazón de ambas aficiones, se jugará a puerta cerrada.

El filial amarillo es conducido por el exjugador del Algeciras Club de Fútbol Juanma Pavón por tercera andadura consecutiva y su fútbol (con un 1-4-1-4-1) se asemeja mucho, muchísimo, al que tanto rédito le está dando a Álvaro Cervera en la máxima categoría nacional. Puede que no muy vistoso, pero tan condundente como efectivo.

En la convocatoria del filial han entrado dos jugadores, el meta catalán de origen argentino Juan Flere y el lateral zurdo Marc Baró, que vieron desde el banquillo el triunfo amarillo de la noche del viernes en Ipurúa sobre el Éibar. El armazón del Cádiz B, al menos en lo que se refiere a su once inicial, se asemeja bastante al de la temporada pasada.

El técnico cadista opta por la prudencia y en las declaraciones previas al duelo recuerda que los anteriores dos triunfos ya son parte del pasado y ahora toca centrarse en el presente.  “Ya hemos olvidado lo que ha sucedido con esas dos victorias”, asegura con rotundidad.

Mucho respeto al adversario. “Nos medimos a un rival fuerte y duro que intentará sacarnos de nuestras casillas. La Balona es un equipo veterano que sabe jugar a lo que quiere y eso hará el partido muy difícil”.

Pavón se deshace en halagos al entrenador de los albinegros. “Calderón conoce bien la categoría y tiene muy bien trabajado a sus equipos. Nosotros lo supliremos con trabajo, ilusión e intentando equivocarnos poco”.