La familia materna de Ruth y José, los hermanos de 6 y 2 años desaparecidos el pasado 8 de octubre, ultiman la organización de una gran marcha silenciosa en Córdoba para finales de mes, según avanzó ayer la portavoz de la familia, Esther Chaves. La intención era que la manifestación tuviera lugar el próximo 27 de noviembre, pero la familia ha decidido plantear otra fecha -el día 26 o el 2 de diciembre- para no solapar el acto con la manifestación de la Plataforma Cordobesa contra la Violencia sobre la Mujer para conmemorar el Día contra los Malos Tratos.

Al acto, al que está previsto que acudan familiares de los niños, se unirán particulares de Huelva, de donde es la familia materna, y de Córdoba, donde los pequeños se perdieron. Hasta entonces, continuarán las muestras de respaldo y está previsto que en la plaza de las Monjas, en Huelva, se celebre cada jueves una concentración convocada por los compañeros de trabajo de Ruth Ortiz, la madre de los pequeños. En Córdoba capital, se mantendrán los actos cada sábado en el Bulevar.

Chaves reconoció ayer que la abogada de la familia no estuvo presente el miércoles en la declaración de los familiares de José Bretón en el juzgado, debido a que -justificó- la madre se ha personado en el caso para tener acceso directo a la investigación y para "ayudar". Descartó, además, que Ruth Ortiz y sus familiares hayan sido llamados a declarar como testigos en el sumario.

La madre, los dos hermanos y el cuñado del padre de los niños, José Bretón, único imputado en la causa, respaldaron el miércoles ante el juez su versión. Esto es, que los pequeños pasaron la mañana con la hermana de Bretón, que éste los recogió para ir a casa de los abuelos y que de allí partieron en coche. También confirmaron que cruzaron varias llamadas con Bretón, con quien quedaron en el Parque Cruz Conde para que Ruth y José jugaran con sus primos. Ningún familiar, sin embargo, vio a los pequeños en el circuito deportivo, pues cuando llegaron ya se habían perdido. Bretón insiste en que alguien se llevó a los niños, una tesis que ayer, de nuevo, puso en duda Chaves.

La portavoz de la familia materna sostuvo que Ruth, la mayor de los hermanos, es "una niña muy tímida que no se iría con cualquiera", aunque lo conociera. Chaves aseguró, por tanto, que ve "poco probable" que la niña se fuera del parque Cruz Conde el día de la desaparición con "alguien conocido" como sostiene su padre. Sí coincidieron ambas partes en creer que los pequeños "están vivos y que alguien los retiene", a lo que apostilló que no existe ninguna prueba que les diga "que no están con vida". A esto se agarran "desde el minuto uno".

Ayer se cumplieron 40 días desde la desaparición y la situación "se lleva mal" porque "es mucho tiempo sin saber dónde están y por qué no están en casa". La madre de los pequeños "sigue mal porque son 40 días sin saber si sus niños han comido, se han vestido o si se han podido poner malos", indicó Chaves, quien explicó que la madre, muy baja de ánimos, no acudiría motu poprio a una posible entrevista con José Bretón, aunque sí "está dispuesta a hacer lo que tenga que hacer por sus hijos, y para ello está a disposición del juez y de la Policía".

El abogado defensor de Bretón, José María Sánchez de Puerta, dijo a última hora de ayer que no tenía conocimiento de que el Cuerpo Nacional de Policía haya concluido la reconstrucción del itinerario en vehículo que siguió el padre el pasado 8 entre Las Quemadillas y el Parque Cruz Conde. Los agentes creen que la prueba será clave para demostrar si los pequeños iban en el vehículo.