historia del puerto de Algeciras (XCI)

El tráfico de corcho y el avituallamiento de buques

  • Historia. En la década de los 40, pescado, corcho y las mercancías bajo el epígrafe de Transportes Militares destacaban entre los tráficos principales del puerto algecireño

Como se ha podido observar con los datos aportados en el artículo anterior, sobre el total de las mercancías embarcadas el corcho representó en el año 1946 el 41,3 % del total. De la cantidad embarcada, 3.913,3 toneladas lo fueron de corcho manufacturado y 9.310,5 de corcho en plancha. Unos años antes, en 1937, el ingeniero director, Francisco Martínez Tourné, señalaba que el almacén que se iba a construir en el lado norte del muelle de la Galera "está destinado en su totalidad al tráfico de corcho, cuya importancia es necesario destacar dado que este elemento, en unión del pescado, constituyen la fuente de ingresos primordiales de este puerto".

En ese mismo sentido, en la sesión celebrada el 12 de febrero de 1947 se justificaba la necesidad de rebajar las tarifas aplicables a determinados tráficos, "debiendo considerarse dos casos especiales de mercancías que constituyen el tráfico principal del Puerto y que han de merecer protección, como son el tráfico de corcho y el de mercancías que circulan bajo guías de Transportes Militares". En la misma sesión se hace referencia al movimiento de corcho "principalísima riqueza de la región y cuya exportación se canaliza por el puerto de Algeciras, teniendo en cuenta la competencia que el mercado nacional sostiene con Portugal y la vecindad del puerto de Gibraltar que puede originar el que (si las tarifas son elevadas) los buques lo utilicen recibiendo la mercancía transportada en gabarras desde Algeciras".

El corcho se almacenaba en el muelle hasta que se procedía a su embarque exportándose, como ya se ha indicado, de dos maneras: en planchas y en aglomerado, manufactura esta que necesitaba estar a cubierto para evitar su deterioro. Según informe del ingeniero director de 24 de mayo de 1952, la principal partida del tráfico comercial del puerto algecireño seguía siendo el corcho. "Es el de Algeciras el primer puerto exportador de España", refiere.

La exportación de corcho a través del puerto de Algeciras se mantuvo con algunas fluctuaciones entre 1939 y 1961, aunque, como puede comprobarse en el gráfico adjunto, nunca tuvo un desarrollo significativo, de manera que las cantidades comercializadas en el año 1947 eran similares a las contabilizadas en 1961.

OTRAS MERCANCÍAS

En la década de los años cuarenta uno de los tráficos más relevantes, junto con el del pescado y el corcho, era el de las mercancías que se embarcaban o desembarcaban bajo el epígrafe de Transportes Militares con destino u origen al Norte de África y que, todavía en el año 1947, representaba una parte importante del movimiento comercial realizado por el puerto, como se puede comprobar por el acta de la Junta levantada en la sesión celebrada el 12 de febrero de 1947. En 1945 se hacía referencia a que el almacén situado en el lado sur del muelle de la Galera, que tenía una superficie cubierta de 528,4 metros cuadrados, estaba arrendado, en una tercera parte, a la Comisión Técnica de Fortificaciones de la Costa Sur y las dos partes restantes a Transportes Militares.

Otros géneros importados, aunque algunos con carácter episódico, eran el cemento, madera, aceite, carbón y hierro (en el año 1956 la Empresa Sucesora de Hijos de Antonio Gil Pineda, consignataria de buques, embarcaba mineral de hierro procedente de la mina Teresa situada en el término municipal de Igualeja -Málaga-).

AVITUALLAMIENTO A BUQUES

Este tráfico no tuvo nunca en el puerto de Algeciras, hasta el final del período que se estudia en este capítulo, una importancia relevante, a excepción de aprovisionamiento de agua, escasa en otros puertos del entorno como Ceuta, Cádiz o Gibraltar. No cabe duda de que el pujante puerto de la colonia británica absorbía buena parte del aprovisionamiento de carbón a los buques a mejores precios que los que pudiera proporcionar el puerto algecireño. No obstante, en el año 1940 el tráfico de carbón estaba considerado, curiosamente, como uno de los importantes del puerto. El aprovisionamiento de gasoil a buques sólo comenzó a tener cierta importancia a partir del año 1958, cuando estuvieron finalizadas las obras de instalación de una factoría de Campsa en la Isla Verde para abastecimiento de gasoil a los barcos de pesca que tenían su base o arribaban al puerto de Algeciras.

En el año 1961 el director del Puerto, José Buiza y Fernández-Palacios, reconocía que los tráficos de suministro a buques "son, hoy día, casi inexistentes". En el Plan de Ordenación del Puerto, elaborado en ese año, se hacía una previsión de los tráficos futuros relacionados con el avituallamiento y se proponía habilitar los medios necesarios para poder atenderlos adecuadamente mediante la ampliación de los frentes de atraque y el aumento de calados con el fin de favorecer a los buques que arribaran para descargar carburante en las instalaciones de la Campsa y para los que llegaran al puerto con el objetivo de avituallarse de agua y de combustible.

En lo que se refiere al carbón, sólo se conservan datos anuales correlativos entre los años 1955 y 1973. En el primero de esos años las toneladas movidas fueron 1.522; en el año 1957 se había alcanzado la cifra de 1.715 toneladas; en 1960 se llegó a las 2.300 toneladas; en 1962 fueron 3.437 y en 1963, 4.317 toneladas. A partir de esa fecha las cifras de mantuvieron con escasa variación o con tendencia al descenso.

En la sesión celebrada el 26 de octubre de 1956, la compañía Depósitos de Carbones de Tenerife solicita la concesión de una zona en el Depósito Franco para la instalación de depósitos para combustibles líquidos y sólidos con destino al abastecimiento de buques, tanto de altura como de cabotaje y pesqueros. No obstante, este tráfico fue disminuyendo paulatinamente. En una de las actas de la Junta de Obras del Puerto, redactada el 4 de mayo de 1965, la Compañía General de Carbones, que se hallaba instalada en el puerto desde el año 1951 y que disponía de una parcela en el extremo suroeste del muelle de la Galera, solicitó autorización para cambiar de lugar el depósito de carbón, alegando también que tenía la intención de abandonar la actividad puesto que "el consumo de este combustible para la navegación ha sido prácticamente abandonado y no existe justificación para mantener un depósito en el muelle del puerto de Algeciras" para un máximo de 4 barcos en un solo día del año.

Antonio Torremocha. Doctor en Historia Medieval. Académico de número de la Academia Andaluza. Director del Museo de Algeciras (1995-2007)

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