La presidenta del Consejo Local de Hermandades y Cofradías de San Roque, Mercedes Caravaca, anunció ayer que ha dimitido de sus cargos orgánicos en el comité local del Partido Popular de San Roque tras conocer que la formación -de la que es afiliada- había elevado quejas ante el Obispado por el veto de la entidad que agrupa a las cofradías hacia la concejal popular Pilar Cuartero, que no fue invitada a actos como la lectura de pregón.

La propia Caravaca expuso que no ha sido una decisión fácil, si bien justificó su acción en la "falta de compromiso" de la edil sanroqueña en su anterior paso por el consejo cofrade. "Antes de su entrada en política, Pilar Cuartero formó parte del consejo local de hermandades. Fue designada secretaria pero al poco tiempo incumplió sus funciones, por lo que fue expulsada", reveló. Cuartero forma parte de la Corporación municipal desde junio de 2011 y además es diputada provincial, por lo que se trataba de su primera Semana Santa como representante pública. "Debo recordar que el consejo local no es una entidad política y se reserva el derecho del protocolo. Hay una doble lectura: Cuartero representa a una institución municipal pero el cargo en el Consejo Local de Hermandades y Cofradías de San Roque se jura ante los Santos Evangelios. Y ella no cumplió. Es motivo suficiente para que su presencia no sea grata", zanjó Caravaca.

Además, como réplica y ante lo que ha considerado un ataque del PP, Caravaca confirmó que ya ha registrado un escrito para dejar de ser vocal del comité ejecutivo local de la formación conservadora.

El presidente del PP, Fernando Palma, dijo desconocer que Caravaca había decidido dejar sus responsabilidades en el seno del PP sanroqueño. "Respeto su voluntad, como parte de un grupo democrático", sostuvo. Sí confirmó que el PP se quejó ante el Obispado por el vacío hacia la edil de su grupo. "Ella dijo, supuestamente, que invitaba a quien le daba la gana. Eso fue un día antes de las elecciones autonómicas, el día del pregón", precisó.

Este diario contactó telefónicamente con la concejal sanroqueña, quien emplazó a conversar a lo largo de la tarde para aportar su punto de vista. Posteriormente no atendió las repetidas llamadas de esta redacción.