La daga de Marfil es la cuarta entrega de la serie de novelas históricas de Octavio Sánchez-Machuca. El escritor de La Línea con esta publicación, editada por Áltera, da continuidad a la historia que inició en el 2007 con El asedio del diablo, seguido de El alma en la batalla (2009) y Emboscada en Nápoles. La presentación oficial de su última novela está prevista para mediados de octubre en Madrid.

Sánchez-Machuca es profesor universitario de Ciencias Políticas en excedencia, especialista en Gibraltar, que es precisamente el tema sobre el que desarrolló su tesis doctoral. A raíz de ese estudio, aprovechó la documentación recabada para aventurarse en el mundo de la novela, hasta entonces desconocido para él al dedicarse en exclusiva a la investigación científica.

Con esta base creó el personaje de Beltrán Ochoa, oficial de Dragones de Pavía, participante directo en el llamado Gran Asedio a Gibraltar en la última guerra hispano-británica (1779-1783). Desde el punto de vista literario, la situación de España como gran potencia mundial en la segunda mitad del siglo XVIII, permitió al escritor linense recrear aventuras en medio mundo y en los escenarios más insospechados y exóticos, manteniendo siempre, como punto de partida, el asedio a Gibraltar.

En el caso de su última novela con este personaje, La daga de marfil, el primer capítulo arranca en el fuerte de Santa Bárbara en La Línea, donde se reproduce un episodio real ocurrido durante los años del asedio, al que añade una parte de ficción. El resto de la historia se desarrolla entre Jerez y Sevilla.

En todas las aventuras de Beltrán existe un componente real, prácticamente desconocido para el gran público, tomado de los diarios de campaña españoles del asedio. A partir de ese dato, construye la trama de la novela, en la que combina hechos reales y ficticios. "Siempre intento incluir un detalle histórico en mi obra, con la idea de fomentar el conocimiento de nuestro pasado, máxime si se ha producido en el Campo de Gibraltar", detalla Sánchez.

Señala el autor que se da la circunstancia de que Mediaset se ha interesado por el personaje, cuyas aventuras están plagadas de acción, desengaños personales y hechos históricos poco conocidos por el gran público, matizado todo ello con notas de humor que humanizan a los personajes y el propio argumento.

Publicó su primer título en 2004, un libro de historia donde se compilaban los archivos correspondientes a las Fuerzas Españolas que participaron en el Gran Asedio a Gibraltar. Entonces tenía 41 años y hasta entonces solo había escrito sobre temas científicos relacionados con su trabajo como profesor de Ciencias Políticas. Entre sus obras está El espía oscuro (Chiado, 2014), Gibraltar 1779-1783. Diario de una campaña (Balkan, 2004) y Origen y evolución de la política española sobre Gibraltar (Universidad de Granada, 2000).

"El salto a la narrativa lo realicé partiendo de parte de la documentación recopilada para mi doctorado en Ciencias Políticas y en Sociología", reconoce el linense. Esta información le permitió crear el personaje de Beltrán Ochoa. El hecho de que se decantase por la novela histórica "parte de mi pasión por la historia de la comarca, sobre todo la vinculada al siglo XVIII, literariamente poco desarrollada en la narrativa nacional".

Sus autores favoritos son muchos y variados, tanto en época como estilo. Desde Verne, Salgari, Pérez Galdós, Macdonald Fraser, Patrick O'Brian, Pérez-Reverte, entre otros.