José Luis Acosta, reelegido ayer presidente de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), propondrá la figura de un consejero delegado, con el fin de tener una presidencia menos ejecutiva, y ha señalado que la casa "necesita cambios". Acosta señaló durante una rueda de prensa posterior a la votación del nuevo presidente que una de sus propuestas será la creación de la figura de un consejero delegado, algo para lo que no tendrá problema en que se baje su sueldo, porque considera que es necesaria una "presidencia menos ejecutiva".

Tal y como destacó, la SGAE juega "mucho en los próximos años" y espera que "el sentido común predomine". No obstante, Acosta admitió que esto no es fácil, puesto que se trata de una entidad con "diferentes colegios" en los que se agrupan varias áreas profesionales, una entidad "peculiar" en Europa que solo encuentra un caso similar en Italia.

Por ello, ha asumido que el hecho de que reúnan intereses tan distintos hace "difícil" la gobernanza. A pesar de ello, ha asegurado que existe "buena voluntad" y lo aprendido sirve para el futuro. En cuanto a las cuentas de 2013 y 2014, que fueron rechazadas en febrero y han de ser aprobadas por mayoría simple, el presidente reelegido ha dicho que se estudiarán en la reunión de la Junta Directiva del próximo 25 de junio. Acosta espera que sean aprobadas para conseguir el "funcionamiento normal de la casa". Asimismo espera acometer las reformas que se necesitan para desarrollar un plan a dos años donde se cumpla la optimización de la casa que, según ha destacado, es "prioritaria". Acosta defendió que su actitud siempre ha tratado de ser de "consenso" en este asunto, pero tiene "claro" que si no se llega a un acuerdo "habrá que salir adelante".