El tiempo
La borrasca Emilia golpea el Campo de Gibraltar

El sueco que cruza Europa en una tabla de pádel surf está a punto de llegar a Gibraltar tras más de mil días de travesía

Jonas Böhlmark partió en 2022 del fiordo Lyngenfjord, en el norte de Noruega, y recala ahora en Chiclana antes de completar su viaje hasta el Peñón con un mensaje sobre salud mental

El 'Launchpad', el megayate de Zuckerberg, atraca en Gibraltar en medio de la controversia por su impacto ambiental

Jonas Böhlmark partió en 2022 del fiordo Lyngenfjord, en el norte de Noruega, y recala ahora en Chiclana antes de completar su viaje hasta el Peñón. / @jonasbohlmark

Las olas de La Barrosa han recibido a un visitante inusual. Sobre una tabla de pádel surf, curtido por el viento y el salitre, ha llegado Jonas Böhlmark, un aventurero sueco de 35 años que lleva más de tres años remando —literalmente— desde el norte de Europa. Su meta: alcanzar Gibraltar, el punto donde el Atlántico se funde con el Mediterráneo, y cerrar así una travesía que comenzó en el fiordo Lyngenfjord, al norte de Noruega.

Böhlmark emprendió el viaje en 2022 con una idea que combinaba desafío físico y propósito vital. “No es solo una aventura; también es una forma de hablar de salud mental”, ha explicado en varias entrevistas y en sus redes sociales. El deportista, que padece trastorno bipolar, busca dar visibilidad a esta enfermedad a través del deporte y el contacto con la naturaleza.

Este jueves, el alcalde de Chiclana, José María Román, lo ha recibido en el Ayuntamiento como reconocimiento a su hazaña y a la historia que representa. En la localidad gaditana ha encontrado refugio temporal frente al temporal de viento y lluvia que azota estos días la costa. En cuanto amaine, tiene previsto retomar la ruta hacia el Estrecho. “Gibraltar está cada vez más cerca”, ha asegurado con una sonrisa que mezcla cansancio y emoción.

En estos 1.143 días de travesía, el aventurero —que en redes sociales se hace llamar The Last Viking— ha recorrido buena parte del litoral atlántico europeo, avanzando por etapas, dependiendo de las condiciones del mar y del terreno. En sus perfiles documenta cada jornada: amaneceres solitarios, noches bajo tormentas, encuentros con delfines o con desconocidos que se convirtieron en amigos. Su tabla, decorada con firmas y mensajes, es ya un mapa de la solidaridad que ha encontrado a lo largo del camino.

No todo ha sido épico. En una de las etapas sufrió una grave infección en el cuello que lo obligó a permanecer tres semanas hospitalizado. “La gente me salvó, literalmente”, escribió entonces en sus redes. Superado el susto, retomó la aventura con la misma determinación, decidido a cumplir la meta que se había impuesto: unir el punto más al norte de Europa con su extremo más al sur, remando a golpe de esperanza.

Mientras espera que amaine el temporal, Jonas disfruta de la hospitalidad chiclanera. “Solo he encontrado gente maravillosa”, dice. Cuando cruce el Estrecho y pise Gibraltar, cerrará un viaje que empezó con un remo, una tabla y una idea: que incluso desde el extremo más frío de Europa se puede llegar al sur.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último

CB Marbella - ULB | La crónica

(86-71) La ULB enlaza su quinta derrota