El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, expresó este viernes su satisfacción por los avances de la UE para hacer frente al alza de los precios energéticos, pero reclamó mayor celeridad para aplicar las medidas impulsadas en la cumbre de Bruselas porque "no hay tiempo que perder".

En la rueda de prensa que ofreció al término de la reunión del Consejo Europeo en la que los socios pactaron desarrollar fórmulas que puedan abaratar la energía, Sánchez consideró que el resultado es satisfactorio y que el esfuerzo mereció la pena.

Pero precisó que en materia energética le habría gustado que se acordara una celeridad mayor en la adopción de las medidas.

Sánchez recalcó que los pasos que se van dando para establecer un límite al precio del gas, hacer compras conjuntas, extender a toda la UE la excepción ibérica y reformar el mercado de la electricidad, son iniciativas que ya planteó España hace tiempo y, por tanto, se reconoce y se ve reflejado en ellas.

"España ha jugado un papel central, siempre propositivo, siempre constructivo, y aunque nos habría gustado que fuera más rápidamente, las instituciones comunitarias están haciendo suyas muchas propuestas", afirmó.

Pero insistió en que hay que ser más ambiciosos y dijo que ahora toca trabajar rápidamente "porque no hay tiempo que perder" con el fin de que las propuestas puedan ser adoptadas con urgencia y, si es posible, hacerlo en la reunión que mantendrán los ministros de Energía de la UE la próxima semana.

"Nos estamos acercando al momento crítico para llegar a un acuerdo", recalcó.

Preguntado por la posibilidad de que el tope al precio de gas sea una realidad antes de la Navidad, recordó que el mandato que tienen los ministros de energía es ponerse de acuerdo "en cuestión de días" y, por tanto, que esté en vigor antes de fin de año.