La derrota de la Balompédica por cinco goles a dos el pasado sábado a manos del Real Jaén en el estreno liguero volvió a desenterrar fantasmas de un pasado cercano. La ilusión de la parroquia albinegra por comenzar la temporada con una victoria, en un feudo inexpugnable hasta la fecha para la entidad de La Línea, se desvaneció. Pese a que el equipo no mostró en el estadio Nuevo La Victoria su mejor versión, o al menos la que se espera de esta remozada plantilla, el capitán albinegro, Ismael Chico, salió ayer al paso para calmar las aguas y demostrar que esta plantilla tiene mucho que decir este curso. "La gente tiene que estar tranquila, esto solo acaba de empezar", expresó.

El capitán de la Balompédica, que este curso cumple su decimocuarta temporada vistiendo la camiseta del primer equipo, omite cualquier tipo de duda sobre el equipo y pide calma a la afición, convencido de que el próximo sábado, frente al Sanluqueño, el equipo conseguirá los tres primeros puntos del curso y la confianza irá en aumento. "Creo que el equipo compitió bien. El que no haya visto el partido puede pensar que el Jaén fue muy superior, pero no fue así", explicó el del barrio de La Atunara. "Estuvimos cerca de empatarles con un jugador menos sobre el campo, pero cometimos errores individuales y puntuales que en esta categoría se pagan", prosiguió. "En líneas generales estuvimos bien, aunque ellos fueron más contundentes que nosotros", reiteró.

La apuesta del técnico Manolo Ruiz por jugar con un sistema táctico formado por tres defensas y dos carrileros también dio que hablar en el entorno balompédico. Un sistema que el equipo ya ha venido trabajando en diferentes ocasiones incluso en partidos oficiales desde la llegada del técnico jerezano al banquillo de la Balona a finales de 2015, pero que en esta última prueba dejó un mar de dudas al respecto. "No es el sistema habitual con el que jugamos, pero si que es verdad que ya lo teníamos ensayado con anterioridad. Yo creo que los sistemas no tienen nada que ver, empezamos ganando, con el partido bastante complicado, pero los errores los pagamos caro", explicó Chico al respecto.

"Hay que estar tranquilos y seguir creyendo, vamos a hacer una buena temporada y esto acaba de empezar, no pasa nada", expresó el capitán, que hizo un llamamiento a la calma de la parroquía linense.

El Sanluqueño, que venció en la primera jornada al Jumilla, es el próximo rival de la Balona en el estreno en Liga como local, aunque el partido se disputará en el Polideportivo San Rafael de Los Barrios debido a las obras en el Municipal linense. "Todos los rivales van a ser difíciles, aunque sea un equipo recién ascendido. Hemos tenido muchos enfrentamientos con ellos a lo largo de la historia y sabemos que es un rival complicado. Seguimos creyendo y estamos convencidos de que vamos a conseguir los tres puntos", dijo con rotundidad y convencimiento Ismael.

Una victoria ante los de Sanlúcar de Barrameda llevaría de nuevo la calma al entorno blanquinegro, dolido tras el tropiezo en la capital del Santo Reino. "Yo creo que la gente tiene que estar tranquila, esto acaba de empezar y no quiere decir que vayamos a acabar abajo en la tabla", afirmó el mediocentro. "Esto va a dar muchas vueltas y cambiará muchísimo, el equipo no estuvo tan mal el otro día", añadió.

La Balona entrenó ayer en horario matinal en las instalaciones de San Roque Club y volverá al trabajo mañana en doble sesión tras una jornada, la de hoy, de descanso.