Raúl Procopio vaticina que 'su' Balona será campeona de grupo

El exjugador y ex entrenador de la Real Balompédica Raúl Procopio sólo ve virtudes en el que fue su equipo. Procopio ascendió enfundado en la elástica blanquinegra en 1999 después de empezar aquella campaña bajo el mando del actual técnico albinegro, Rafa Escobar; después afrontó dos liguillas en el banquillo. El pasado domingo acudió a ver a su equipo, al que vaticina un futuro muy prometedor.

Independientemente de su condición de segundo clasificado y de las once jonadas que hilvana sin conocer la derrota, Raúl Procopio entiende que con la Balona "siempre hay que contar, por lo que supone en esta categoría, que se le está quedando pequeña".

En el duelo entre el Cádiz B y la Balona (0-2), el equipo de La Línea fue, en su opinión "superior siempre, pero especialmente en la segunda mitad".

"La Balompédica demostró el saber estar y la veteranía que le permiten estar en la zona alta", insistió. "No es una casualidad que aspire a ser campeón, porque está por encima de todos los equipos del grupo que he tenido oportunidad de ver".

"No puedo pronunciarme sobre el ascenso, porque, exceptuando el grupo noveno, no conozco el potencial de los equipos de la parte alta del resto, pero sí puedo decir que veo a la Balona con posibilidades de ser campeón y que es algo por lo que tiene que pelear. Al final la estadística demuestra que el ochenta por ciento de los primeros de grupo son los que logran el ascenso", recalcó.

El exdefensa admite que la Tercera "ha dado un bajón importante" en las últimas campañas. "No tiene nada que ver, por ejemplo, con el año que yo jugué con la Balona en esa categoría; entonces había equipos muy fuertes y aunque esté mal decirlo, es una competición devaluada y con mucho".

"He visto esta temporada a equipos que en años precedentes tenían mucho que decir y ahora ofrecen una imagen penosa". insiste. "De hecho el nivel ha bajado en todas las categorías y eso se refleja en ésta".

"Todos deberíamos hacer un poquito de reflexión, porque igual el problema parte de nosotros", abunda. "Hay que buscar soluciones".

Tras su aventura en el Estepona, con el que logró como entrenador el ascenso a Segunda división B que se le había negado en La Línea, el exalbinegro está a la espera de una "oportunidad interesante, porque lo que ha surgido hasta ahora o no merecía la pena o se ha ido al traste por detalles".

"De momento me dedico a ver fútbol y actualizarme, que es lo que tiene que hacer un entrenador cuando no trabaja", comenta, al tiempo que no descarta regresar algún día al Municipal linense.

"Añoro aquellos sitios en los que me he sentido querido y La Línea es el ejemplo de eso", acaba. "Allí tengo muy buenos amigos y es imposible no tener un sentimiento de cariño con una ciudad que me dio tanto", recalca.

"¿Si volveré? Uno nunca sabe qué le depara la vida, pero me encantaría y además que fuese en una categoría superior, porque sería señal de que la Balona está con buena salud y que se acuerdan de mí en un sitio que durante muchos años fue mi casa, que no es una mala señal".