Uno de los tres agentes de la Policía Local que denunció en 1998 la expulsión irregular de menores a Marruecos ha declarado hoy que se negó a hacer esta labor porque se estaba infringiendo la normativa vigente.

El agente, que ha preferido mantener el anonimato y que lleva 23 años ejerciendo esta labor, ha manifestado en la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta que había llevado a menores a la frontera para entregarlos a las autoridades marroquíes tras ser detenidos en la ciudad.

El funcionario policial, en compañía de otros dos agentes, ha indicado que decidió denunciar los hechos tras realizar un curso de formación sobre la Ley de Protección al Menor.

El agente ha puesto de manifiesto que este curso le llevó a decidir negarse a entregar a menores en Marruecos a no ser que se produjera una orden por escrito de sus superiores, al entender que esta acción estaba fuera de la ley vigente.

En la jornada de mañana del juicio prestarán declaración los otros dos agentes que denunciaron en 1998 este caso ante la Fiscalía.

En el juicio se piden seis años de prisión y doce de inhabilitación para el ex delegado del Gobierno Luis Vicente Moro por delitos de prevaricación y detención ilegal.