El Marbella FC desembarca en La Línea con la vitola de ser uno de los dos invictos del grupo IV de la Segunda B, pero también, después de hilvanar tres empates en sus viajes, con la necesidad de lograr un triunfo fuera que le catapulte a la zona alta y que consolide la condición de favorito al ascenso que sus propios dirigentes y las autoridades locales recalcaron durante el acto de presentación. García Cubillo recupera para este compromiso a dos jugadores tan importantes como Óscar García y Paulo Víctor. El técnico desplaza a los 21 jugadores disponibles, ya que su única baja es el lateral diestro Saúl González, cuyo relevo es una incógnita.

El Marbella es el equipo de los números. Uno de los dos invictos del grupo IV antes de que arranque la séptima jornada. Uno de los siete que aún no había conocido el viernes la derrota en las tres primeras categorías del balompié nacional junto a Real Madrid, Real Zaragoza, San Fernando, Calahorra, Real Sociedad B y Castellón. El segundo con mejor racha sin conocer la derrota (ocho partidos) solo por detrás del Castellón. Apenas dos reveses desde que arrancó 2019, que es lo mismo que decir desde que su técnico, García Cubillo, tomó las riendas de la plantilla como relevo de Rafael Pérez Guerrero Padilla. En fin…

El conjunto malagueño, que fue el segundo mejor de la segunda vuelta la pasada campaña. mantuvo a 15 jugadores en el plantel, entre los que se encuentran Elías Pérez (ex de la Balona) y el incombustible Javi Añón (ex de la UD Los Barrios).

Los costasoleños que han firmado tablas en sus tres desplazamientos y vienen de enlazar dos empates (en Don Benito y ante el Atlético Sanluqueño) recupera para este compromiso a dos futbolistas extremadamente importantes, el delantero Óscar García (que viene de marcar 15 goles en el Melilla y 19 en dos campañas en el Leioa) y el brasileño Paulo Víctor (Vasco de Gama y Albacete), que solo pudo alinearse en las dos primeras jornadas. Por lo tanto la única baja es la del lateral derecho Saúl González (ex de la Cultural) que comenzó anotando goles, pero al que una lesión ha apartado de la competición.

El preparador, David García Cubillo, define el partido como “una especie de derbi entre entre dos equipos parecidos” y recalca la importancia para los suyos de “hacer un gol y que la Balona no marque primero” para que pueda lograr lo que considera “una victoria de prestigio”.