El vestuario de la Real Balompédica era un cementerio tras consumarse la derrota ante el Algeciras que aúpa al eterno rival a la Liga Pro y deja a los de La Línea con escasísimas posibilidades de alcanzar ese objetivo en la primera fase. Los jugadores albinegros se confesaban muy tristes, pero, como hizo su entrenador, Antonio Calderón, apelaron a la paciencia y a la posibilidad de lograr el ascenso vía segunda fase.

Antonio González Antoñito, que vio ascender en el Municipal al equipo al que pertenecía la pasada andadura aseguró: “No es un momento fácil para nuestro vestuario, para nada. A la afición solo le podemos decir que lo sentimos mucho, pero que pueden estar tranquilos porque lo vamos a dar todo para conseguir el objetivo... por las buenas o por las malas”.

“Lo intentamos todo desde el primer minuto, nuestra gente lo puede valorar, nos dejamos la vida en el campo, lo buscamos por dentro y por fuera pero al final ellos, que solo perseguían el empate, se llevaron el premio de la victoria”, reflexionó.

“Nosotros hicimos el esfuerzo por hacer las cosas bien, pero ni el balón quería y en la segunda parte quizás estuvimos más precipitados y ellos supieron esperar para llevarse el triunfo”, analizó.

A pesar del varapalo, el jugador algecireño asegura que la Balompédica se recompondrá y peleará por el ascenso a la Primera Federación ya sea de manera directa o a través de la segunda fase. “En cuanto nos serenamos en la caseta ya lo estaba diciendo, que en el peor de los casos hay una segunda fase en la que podemos conseguir el objetivo y por mucho que estemos muy jodidos desde este lunes cuando empecemos a entrenar hay que pensar ya en el Marbella y, si no se puede, en la segunda fase”.

Antoñito no quiso dejar pasar la oportunidad de “darle la enhorabuena al Algeciras” y añadió: “Han hecho una primera fase increíble”.

El capitán de los albinegros, el Talaverano Sergio Rodríguez dijo estar “viviendo un momento complicado”.

“Para todos nosotros significaba mucho este partido y la derrota y de la forma que fue duele y mucho”, abundó.

“Nuestra afición se fue del estadio como nos fuimos todos, es un golpe muy duro, nos sentimos muy tristes”, explicó el zaguero. “Ahora lo que se impone es la sensación de angustia, pero cuando empiece la nueva semana hay que pensar en Marbella y a ver qué pasa... y si no aún queda la segunda fase”,