Detenido por presunta estafa el gerente de la inmobiliaria Hauser en Algeciras

Un cartel en el escaparate promete vacaciones. Pero dentro, desde el pasado viernes 20 de junio, no hay más que silencio y cerrojo. La oficina de atención al público de la inmobiliaria Hauser, una firma conocida de la calle Alfonso XI de Algeciras está cerrado a cal y canto tras la detención de su gerente, F.J.S., investigado por presunta estafa por la Unidad de Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional de la ciudad.

El arresto, según fuentes policiales consultadas por Europa Sur, se produjo en Canarias y ha causado gran impacto en el panorama inmobiliario del centro de Algeciras. Poco después de la detención y a plena luz del día, una docena de agentes irrumpieron en la oficina de Hauser para llevar a cabo un registro. Desde entonces, la persiana permanece bajada, aunque sus redes sociales continúan activas como si nada hubiera ocurrido. Tras prestar declaración, F.J.S. fue puesto en libertad bajo la condición de investigado.

La investigación gira en torno a las entregas realizadas por diversos clientes para la compra-venta de inmuebles bajo la promesa de lograr altas rentabilidades en dichas operaciones. También hay denuncias sobre el supuesto uso fraudulento de las señales económicas aportadas por los clientes para reservar inmuebles, un procedimiento habitual en las llamadas arras. Esta cantidad —que se descuenta del precio final de compra— debería servir para garantizar la operación, pero en este caso era, presuntamente, el instrumento de un engaño sistemático. Las fuentes policiales mantienen que se siguen recibiendo denuncias por parte de nuevos afectados y que el volumen de dinero reclamado es importante.

La inmobiliaria se presentaba. además, como comercializadora de una promoción de viviendas y garajes de nueva construcción en una parcela privilegiada: calle Coronel Ceballos, esquina con la plaza Sur de Europa. Como avanzó este periódico, la intención es derribar siete edificios en ruina o abandonados que, en su conjunto, suman 1.100 metros cuadrados de suelo y comenzar cuanto antes la construcción.

Sin embargo, la empresa promotora de este proyecto, Biogen Diagnóstica SL, niega de forma tajante relación alguna con el detenido o con los hechos denunciados. "Nuestra promoción no está comercializándose porque ni tan siquiera existe un proyecto aprobado con licencia (hecho este que pueden corroborar con el Ayuntamiento), encontrándose actualmente en fase de estudio por nuestra dirección el proyecto definitivo a realizar", indica en un comunicado dirigido a esta redacción. "Somos una víctima más de ese señor al que ni siquiera conocemos", indica un portavoz de la empresa, cuya actividad principal se centra en el sector médico.

Un reguero de quejas

Clientes afectados llevaban tiempo denunciando un comportamiento irregular de la inmobiliaria, como muestran las numerosas reseñas negativas en Google. Las experiencias se repiten: señales entregadas que no se devuelven, contratos que se rompen sin previo aviso y comunicaciones que desaparecen una vez que surgen los problemas.

Una pareja cuenta cómo, tras presentar su oferta formal y enviar la documentación requerida, fue descartada de forma abrupta: “Nos dijeron que los compradores anteriores habían cambiado de opinión y que seguían negociando porque aún no les habían devuelto la señal. Un ahora sí, ahora no sin ningún rigor”, lamentan.

Otros testimonios denuncian falsas promesas, retrasos de meses en la devolución de depósitos —en algunos casos solo resueltos tras la intervención de abogados— e incluso prácticas que rozan el chantaje emocional. Una clienta recuerda cómo la inmobiliaria intentó modificar las condiciones el mismo día de la firma: “Nos pidieron que dejásemos a la propietaria quedarse en la vivienda uno o dos meses más. A ella le dijeron que ya lo habíamos aceptado. Era mentira”.

El patrón es recurrente. Una mujer joven entregó 3.000 euros como señal con la esperanza de comprar una vivienda tras preguntar insistentemente si el dinero sería devuelto si no obtenía la hipoteca. “Nos lo aseguraron y nos señalaron la cláusula. Cuando no conseguimos la financiación, nos ignoraron, no respondieron al burofax ni a las llamadas. El dinero nunca volvió”.

Una de las quejas más duras viene de un cliente extranjero que depositó 5.000 euros y vio cómo la operación se deshacía por parte del vendedor. “La agencia retuvo el dinero durante tres meses. Cuando mi abogado contactó con ellos, me lo devolvieron en pocas horas. Estoy seguro de que intentaron aprovecharse de mí por no ser español”.

De la “casa de tus sueños” al cierre por registro

En su web, Hauser se definía como “la mejor solución inmobiliaria”. Presumía de más de 20 años de experiencia, ofrecía financiación, asesoramiento personalizado y hasta reformas integrales. Hoy, esa promesa se ha desvanecido tras una cortina metálica y un cartel que pide disculpas por unas vacaciones que nunca terminaron.

El caso sigue bajo investigación y F.J.S., pendiente de que concluya la investigación policial sobre su actividad empresarial.

De momento, nadie atiende al número de teléfono que aparece en la web de la empresa. La “casa de sus sueños” tendrá que esperar.