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Rosario Flores despide con arte y pasión el Cabaret Festival en Algeciras

La cantante cierra el ciclo en Las Palomas con un repaso emocionante a sus 33 años de carrera y un espectáculo lleno de ritmo, agradecimiento y recuerdos

Rosario Flores, este viernes en Algeciras. / Andrés Carrasco

Rosario Flores volvió a demostrar este viernes por qué sigue siendo una de las grandes figuras del panorama musical español. Lo hizo en la plaza de toros Las Palomas, en Algeciras, donde cerró el cartel del Cabaret Festival con un concierto que fue una auténtica celebración de su trayectoria, de su arte y de su conexión con el público.

Desde los primeros acordes, Rosario se entregó por completo con un repertorio que abarcó desde sus inicios con De Ley hasta su último trabajo, Universo de Ley, un disco en el que revisita sus grandes éxitos junto a artistas como Estopa, Niña Pastori, Fito Páez o Sebastián Yatra. Aunque estos duetos no pudieron acompañarla en directo —algo que ya había advertido—, su fuerza en el escenario bastó para llenar cada tema de emoción y frescura. La artista también tuvo palabras hacia el público, al que no pudo cantar el pasado 1 de agosto por indisposición, al que agradeció su paciente espera de tres semanas.

Acompañada por una banda “que suena como los dioses” —como ella misma había prometido— y por unos bailaores flamencos que pusieron al público en pie más de una vez, la cantante ofreció un espectáculo cuidado, potente y lleno de energía. Hubo tiempo para el desgarro, para el ritmo y también para la nostalgia. “Estoy muy contenta, de celebración, agradeciendo a la vida todo lo que me ha dado”, dijo antes de interpretar algunos de sus clásicos más coreados como Algo contigo, Qué bonito o Como quieres que te quiera, tema que ha versionado con Sebastián Yatra en su nuevo disco.

“Este concierto es un homenaje a mi carrera”, explicó durante el show, visiblemente emocionada. Y lo fue. Rosario repasó en casi dos horas todas las etapas de su vida musical, con una entrega que terminó por conquistar a un público fiel que no dejó de cantar y aplaudir.

Algeciras acogió con cariño a una Rosario Flores que atraviesa, como ella misma afirma, “un momento muy bonito de su vida”, y que este viernes dejó claro que, a sus 33 años en la música, sigue más viva, libre y flamenca que nunca.

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