Cuando los fenicios desembarcaron en las costas gaditanas hace ya 3.000 años, dejaron en ellas su conocimiento de la viticultura y la producción de vino que se ha ido perfeccionando hasta convertirse en el mayor tesoro de la provincia.
Las condiciones climáticas, la composición predominante de los suelos y numerosas circunstancias históricas, han determinado el desarrollo de una vitivinicultura única y de calidad reconocida en toda España. Se puede por tanto decir, que los vinos de la Tierra de Cádiz tienen una personalidad diferenciada.
Bodegas Barbadillo ha conseguido aunar lo mejor de España y confeccionar bajo sus 500 hectáreas de viñedos en tierras albarizas, uvas muy especiales bajo la luz única del sol de Cádiz: Chardonnay y Palomino Fina.
De esta mezcla inigualable nace Beta Sur, el Brut del Sur más fresco e innovador de esta bodega sanluqueña, elaborado bajo el método tradicional o ‘champenoise’, un vino que no deja indiferente a quien lo prueba.
La peculiaridad de este vino es que está elaborado con segunda fermentación en botella, bajo una crianza de 20 meses sobre lías. Se engloba dentro de los Brut Nature, una calificación que obtienen aquellos vinos espumosos a los que no se les añade azúcar después del degüello y que, en el caso de Beta Sur, se deja un contenido de azúcar inferior a 3g/l.
Beta Sur de Barbadillo.
Maridaje
Beta Sur es un buen aliado de mariscos y pescados, como ostras y salmón marinado, carnes a la plancha, salteados de verduras o platos exóticos como el sushi. En postres marida muy bien con frutos secos, pastas o chocolate.
Un claro ejemplo de ello lo vemos en la siguiente videocata, en la que Nina Hernandis, propietaria de Ostrería & Sushi del Mercado de Triana junto con Montse Molina, enóloga de Bodegas Barbadillo, nos presenta una propuesta de maridaje para Beta Sur, que hace honor a su tierra, Cádiz. Se trata de un exquisito atún de Barbate con tartar marinado con trufa y un ligero toque de mayonesa de wasabi, una elección perfecta dado el sabor aterciopelado del atún combinado con la suavidad del vino.
Beta Sur destaca por su color amarillo pálido brillante. En nariz se aprecia su finura y elegancia perfectamente integradas con sus burbujas finas. En boca notamos su suavidad con ligeras notas a frutos secos, pastelería y levadura.
Ficha.
