La posibilidad de que La Línea vuelva a disponer de un único cineclub empieza a tomar cuerpo. Cuatro años después de que los socios y fundadores del cinematógrafo municipal constituyeran la asociación Cinematógrafo en el exilio, que ha funcionado a la par que el organizado por el Ayuntamiento, puede estar cercana la fecha en la que esta actividad vuelva a estar unida en la ciudad. El Consistorio linense y el Cinematógrafo en el exilio ya han hablado de ello.

La existencia de dos cinematógrafos en La Línea tiene mayor trascendencia de la aparente. Una fuerte polémica entre los que eran socios del Cinematógrafo y el que fuera concejal de Cultura, Alfonso Escuadra, estuvo en el origen de la escisión. El asunto levantó tal polvareda que llegó a discutirse en pleno y ser objeto de confrontación entre el PP y la oposición. Además, hay que tener en cuenta que se trata de una entidad cultural de referencia en la ciudad, que este año alcanza su 25 aniversario.

Como es sabido, el alcalde de la ciudad, Juan Carlos Juárez, destituyó a Alfonso Escuadra a comienzos de marzo. Paqui López es ahora la responsable de Cultura del Ayuntamiento. "Ellos me pidieron una reunión y yo me reúno con todo el mundo, con todo el que quiere hablar", explicó ayer la concejala.

El encuentro fue fructífero, a tenor de las declaraciones de López y de Miguel Guerrero, presidente del Cinematógrafo en el exilio. "Hay buena voluntad por ambas partes", resumió la edil.

Guerrero detalló que este mismo jueves los socios de la entidad están convocados a una asamblea en la que serán informados de todo lo concerniente a la reunión mantenida con la responsable municipal. En ese mismo encuentro se someterá al dictamen de los integrantes del Cinematógrafo en el exilio si son partidarios de regresar a un único cineclub, en las condiciones que establezcan ambas partes.

En la reunión entre López y el Cinematógrafo en el exilio se intercambiaron ideas, posturas, sugerencias y planteamientos, según los protagonistas. Hubo un buen grado de entendimiento. Tanto es así que Guerrero cree que si los socios de su asociación votan de forma afirmativa, la fusión es muy factible, a falta de resolver algunos flecos.

López, en cualquier caso, detalla que existe un compás de espera y que ambas partes se han emplazado a que pueda transcurrir el verano para analizar la situación y dibujar el posible panorama nuevo para comienzos de curso.

El cinematógrafo linense se creó en 1984 y fue en 2004 cuando se formó el Cinematógrafo en el exilio. Realizaba sus proyecciones en el instituto Mar de Poniente, aunque desde hace un año ya se llevan a cabo en la Casa de la Cultura.