Los trabajadores de Pau y Sermasa emprenden una huelga indefinida

Los trabajadores de las empresas de limpieza, mantenimiento y porterías de colegios, Pau y Sermasa, han emprendido una huelga indefinida al llevar ya casi tres meses sin cobrar sus nóminas y no haber percibido tampoco la paga extraordinaria de verano. UGT y CCOO han alertado de la dramática situación que viven estos 110 trabajadores y sus familias.

Así, el secretario provincial de la FSP de la UGT, José Porras Naranjo exigió el pago de estas nóminas y criticó a las empresas y al Ayuntamiento: "Tienen que ponerse de acuerdo para que los trabajadores cobren ya porque no pueden soportar más esta situación. Lo están pasando muy mal".

Asimismo, alertó de que los colegios no estarán listos para el comienzo de curso si el problema no se resuelve en seguida.

Por su parte, la secretaria comarcal de CCOO, Inmaculada Ortega, calificó de dramática la situación de estos empleados, "a los que ya de por sí les cuesta llegar a final de mes porque sus salarios no son altos. Después de tres meses sin cobrar la situación es lamentable. En algunos casos están a punto de perder sus casas. Es vergonzoso que una empresa, como Pau y Sermasa, que trabaja a nivel nacional, no pague a sus empleados, como también es vergonzosa la deuda que mantiene con esta compañía el Ayuntamiento. En ningún otro municipio de la comarca se ha vivido esta situación y exigimos que este conflicto sea resuelva ya, que los trabajadores cobren, puedan dar de comer a sus familias y se puedan ir de vacaciones como algunos concejales".

Algunos trabajadores con los que habló este diario corroboraron las dificultades por las que están atravesando. Así, José Francisco Sánchez, delegado de CCOO, aseguró que están viviendo una pesadilla: "Yo ya he perdido mi casa. He tenido que venderla porque no he tenido más remedio. Otros compañeros tienen muchas trampas y han recibido ya la orden de embargo. Algunos recurren a créditos y otros a familiares. No tenemos ni para dar de comer a nuestras familias. No podemos más, estamos al límite".

En similares se expresó Pilar Delgado: "Llevamos tres meses de atrasos de hipoteca, préstamos, coche... Hay compañeros que han perdido sus casas y otros que han recurrido incluso a la venta ambulante para poder dar de comer a sus hijos".

Tanto UGT como CCOO denunciaron además los intentos del concejal de Personal, Gabriel Gonzálvez, para impedir la concentración que estos trabajadores han emprendido ante la puerta del Ayuntamiento y que será de lunes a sábado de once de la mañana a una de la tarde. Tras la manifestación del lunes, más de cincuenta personas, la mayoría empleados de Pau y Sermasa, pasaron la noche en la calle, en la puerta del Ayuntamiento.

Según Porras Naranjo, a las ocho de la mañana de ayer, Gonzálvez envió una máquina baldeadora para limpiar la zona en la que estaban concentrados, así como a varias limpiadoras: "Es bochornoso que haya enviado una máquina de agua a presión para limpiar este lugar, algo que no se había hecho nunca. Luego, ha enviado a varias limpiadoras que han estado más de tres horas limpiando el mismo sitio. Han dejado la puerta del Ayuntamiento más limpia que las arcas municipales, aunque hay que aclarar las limpiadoras no tienen culpa de nada. Estos trabajadores están concentrados en silencio, permitiendo el paso, sin molestar a nadie y en un lugar público, como son los jardines municipales. Es un derecho que les asiste".

Ortega también denunció estos hechos: "El equipo de gobierno ha enviado a seis limpiadoras que han estado aquí cuatro horas limpiando 12 metros cuadrados. Eso se ha hecho con dinero público. El equipo de gobierno ha intentado impedir el derecho a la huelga que tienen estos trabajadores y más cuando llevan tres meses sin cobrar. Están en huelga indefinida, en un lugar público y con la vergüenza que no tienen otros".

El secretario general de CCOO en Cádiz, Manuel Ruiz, también expresó su apoyo a estos empleados y agradeció el respaldo a la manifestación celebrada el lunes. El sindicalista afirmó que CCOO no está dispuesta a permitir que paguen las consecuencias de los problemas existentes entre el Ayuntamiento y estas empresas, "que no pagan a sus trabajadores desde hace dos meses como represión a la deuda que mantiene el Ayuntamiento", señaló en una nota.

Desde USO, que también apoya a la plantilla de Pau y Sermasa, se aseguró que este sindicato pondrá toda la carne en el asador "para respaldar a estos compañeros. Si tenemos que encerrarnos lo haremos. Su problema lo hacemos nuestro. Deben cobrar ya".