Los 'okupas' de la calle Sol desatienden la orden de desalojo dictada por la juez

La titular del Juzgado Mixto número 1 de La Línea dictó el pasado viernes una providencia en la que ordenaba el desalojo a las familias que han ocupado de forma ilegal la promoción de 22 viviendas sociales de la calle Sol, propiedad de la Junta de Andalucía y que están siendo ejecutadas por un promotor privado. El plazo otorgado por la juez finalizó el domingo, sin embargo las familias han desatendido la orden y prosiguen allí, según pudo comprobar ayer este diario.

En la providencia dictada por la juez, a la que ha tenido acceso Europa Sur, ésta alerta de que existe "riesgo para la integridad física" de los ocupantes para justificar su orden de desalojo.

Este riesgo ya fue advertido la semana pasada por la Junta de Andalucía, que desde el principio ha defendido, y así se lo trasladó al Cuerpo Nacional de Policía en la correspondiente denuncia, que lo que ha ocurrido en esta promoción no es una ocupación ilegal sino una interrupción de obra. Así, la Administración autonómica sostiene que las viviendas, que no están adjudicadas, están sólo a un 80% de su construcción.

Este diario se desplazó ayer hasta las viviendas, cuyas entradas fueron forzadas hace hoy nueve días. Algunos de los ocupantes consultados por esta redacción confirmaron que son conscientes de que, al no haber cumplido la orden que la juez dictó el pasado viernes y que les fue entregada en mano, el Cuerpo Nacional de Policía terminará acudiendo al lugar para desalojarles.

No obstante, agregaron que, en el caso de que ésto ocurra, están "decididos" a volver a las viviendas en cuanto les sea posible. Indicaron también que las casas "sí están terminadas" y que no hay "ningún riesgo para las personas".

A este respecto, hay que señalar sin embargo que el patio central de la promoción sí está repleto de material de construcción y otros enseres, así como que el perímetro de las viviendas está rodeado por una valla de color verde que fue retirada en parte para poder acceder a los inmuebles, que tienen suministro eléctrico y de agua potable tras "enganchar" el cableado.

Las familias, que añadieron que han intentado hablar con la juez del número 1 personándose varios de ellos en las dependencias policiales pero sin éxito, colocaron durante el fin de semana varias sábanas en las ventanas informando de su situación y exigiendo su derecho "a una vivienda digna".

Éste no es el único ejemplo de ocupación de viviendas nuevas en La Línea, aunque el caso de la calle Sol es distinto al afectar a inmuebles públicos. Este diario ya informó en su edición del domingo que hay un edificio de la iniciativa privada en la calle López de Ayala que lleva dos años ocupado por familias y personas que no son propietarias.

Además, situaciones similares se están registrando desde hace tiempo en las calles González de la Vega y Alemania. Más alejado del centro, en concreto junto a Venta Melchor, hay otro caso, el de un bloque de viviendas reconvertido en apartahotel.