Manuel Sánchez Cárdenas toma posesión en un Pleno de puro trámite

La corporación municipal del Ayuntamiento de La Línea celebró ayer una sesión plenaria de puro trámite, que duró poco más de cinco minutos y en la que el único punto del día con relevancia fue la toma de posesión del nuevo concejal de Izquierda Unida, Manuel Sánchez Cárdenas, que ocupó el acta que dejó vacante Javier Meléndez tras dimitir el pasado mes de noviembre.

Hubo críticas por parte del PP por la celebración de un pleno de ayer, con ausencia de puntos de relevancia, aunque bien es cierto que ni los populares ni Izquierda Unida, partidos de la oposición en el Ayuntamiento linense, hicieron uso del turno de ruegos y preguntas, por lo que no trasladaron, al menos a ojos de la opinión pública, ningún tipo de cuestiones o preocupaciones sobre aspectos de la ciudad que sí denuncian prácticamente a diario muchos vecinos de la ciudad.

El primer punto del día fue la lectura y aprobación de actas en borrador de sesiones anteriores, que como suele ser habitual se aprobó por unanimidad y sin ningún tipo de debate. A continuación fue el turno de que Manuel Sánchez Cárdenas tomase posesión de su cargo, algo que hizo por "imperativo legal", como suelen hacer los partidos de izquierdas. El ya concejal de Izquierda Unida se comprometió a "trabajar por La Línea" desde su posición y a "hacer guardar la Constitución". Al salón de plenos acudieron miembros de su partido a nivel comarcal, familiares y amigos, que le dieron un cálido aplauso tras jurar su cargo, antes de ocupar su sillón en el salón de plenos.

El tercer punto del día fue la puesta en conocimiento las resoluciones de la Alcaldía, del Instituto Municipal de Empleo y Formación y de la Agencia de Desarrollo Económico del último mes, antes de que se abriera un infructuoso turno de ruegos y preguntas, que se cerró sin intervenciones y tras el que la alcaldesa Gemma Araujo, dio por levantada la sesión ordinaria del mes de enero, al primera de un 2014 que muchos califican que va a ser complicado en La Línea.

La anterior sesión plenaria, la del pasado 8 de enero, fue similar a la de ayer. En esa ocasión fue extraordinaria y sólo contó con un punto en el orden del día, la apertura de un nuevo concurso para la concesión del servicio de transporte urbano en autobús. Duró cinco minutos escasos, como el Pleno de ayer, y no hubo ningún tipo de debate.

En la cita sí estuvieron representantes sindicales de CCOO y UGT, que como suele ser habitual mostraron sus pancartas denunciando que los trabajadores municipales llevan 8 y 10 meses de atrasos en el cobro de sus nóminas, algo que según denunció CSIF la semana pasada puede ir para largo y por lo que ningún partido político preguntó ayer en ese desierto turno de ruegos y preguntas. Tampoco generó inquietud el estado de las ayudas del Gobierno Central, correspondientes al Real decreto-ley 8/2013, que deben llegar en breve espacio de tiempo con el objetivo de normalizar la situación económica de las arcas municipales.