Los Junquillos clama justicia por el asesinato de Jonathan del Río

Los vecinos de la barriada de Los Junquillos claman justicia por el asesinato de Jonathan del Río, que recibió dos disparos a sangre fría durante la madrugada del domingo 29 al lunes 30 del pasado mes de diciembre, sobre las 2:40 de la mañana, en plena calle Virgen de la Palma.

El joven Jhony, de unos 30 años y discapacitado, deja mujer y dos hijas gemelas de seis meses de edad y su familia y vecinos pidieron ayer en el programa Andalucía Directo que la justicia haga su trabajo. Una de sus familiares condenó y lamentó el asesinato. "Ha sido un palo muy grande. Esto no lo esperábamos ninguno. Estaba sin defensa cuando lo mataron y además estaba inválido de cintura para abajo. Siempre estaba de cachondeo con sus amigos y conocía a mucha gente en la barriada y fuera de ella", señaló esta mujer, que indicó que "lo mataron a traición".

Los vecinos no quisieron dar detalles sobre el asunto y se limitaron a señalar que no se enteraron de nada ni oyeron los disparos, sobre todo para evitar cualquier tipo de problema de cara al público, ya que algunos de los habitantes de esta zona de la ciudad estiman que el asesintato ha podido ser a causa de un ajuste de cuentas.

Mientras tanto la Policía Nacional sigue investigando el caso, que se encuentra bajo secreto de sumario. Aún no ha trascendido si hay detenidos, aunque las pistas recabadas en registros practicados en viviendas de Los Junquillos y las versiones de los hechos recogidas en la calle Virgen de la Palma por parte de los agentes apuntan a otro vecino del barrio como presunto autor de los dos disparos que acabaron con la vida de Jonathan, uno en la cara y otro en la nuca, lo que habla de la premeditación del acto. Las manchas de sangre aún pueden verse en el lugar donde fue asesinado Jonathan.

El cadáver del linense Jonathan del Río Cortés apareció en plena calle, donde se encontraba con otras personas que huyeron del lugar tras producirse el hecho. La Policía recibió el aviso y se personó inmediatamente en el lugar, tras lo que dio aviso a la autoridad judicial, que procedió al levantamiento del cadáver cuando ya entraba la mañana. Los familiares del asesinado han recibido durante los últimos días numerosas muestras de pésame.

Este no fue el único asesinato que se produjo en La Línea durante 2013. El viernes 28 de junio un hombre de unos 40 años falleció tras ser agredido con un arma blanca en la barriada de La Colonia, en concreto en la calle Saavedra Fajardo.

Y en 2012, la noche del 23 de diciembre el ciudadano linense P.R., conocido popularmente como El Loquillo, falleció como consecuencia de dos puñaladas letales que le fueron propinadas mientras se encontraba en su propio domicilio, en la calle Ciudad de Tarifa de la barriada de San Bernardo, que también fue desvalijada.