La base naval de la Royal Navy en Gibraltar recibe este lunes la escala del HMS Protector. Es el único buque de patrulla polar de la Royal Navy que llega al Peñón para realizar una visita logística programada.  

Desplegado durante 330 días al año, ha sido sometido recientemente a una remodelación y se ha preparado para su primera visita a la Antártida desde 2019, navegando hasta el Ártico con el fin de practicar sus habilidades para romper el hielo.  

El HMS Protector, cariñosamente apodado la navaja suiza de la Royal Navy, y su tripulación están preparados para cualquier eventualidad que se produzca en sus aguas de referencia, la Antártida y el hemisferio sur, según el Gobierno del Peñón.

Camino de la Antártida, el barco pasará por las islas de Ascensión y Santa Elena para actualizar la cartografía marina de parte de las aguas de estos territorios de ultramar británicos.