A quien madruga...

La Real Balompédica viaja a primera hora de hoy hasta Cáceres, donde pretende reencontrarse con una victoria que se le ha negado en las dos últimas jornadas, en las que se ha descabalgado del grupo de elegidos. Los albinegros, que tenían previsto emprender el camino en la tarde de ayer, lo hacen finalmente hoy como consecuencia del plan de recortes económicos emprendido por la directiva a la vista de lo racano de las taquillas. Rafa Escobar deja en casa al lesionado Óscar Martín y a Salvi y desplaza a Joe y Raúl a un terreno de juego que en un país civilizado no podría albergar partidos de categoría nacional. Bueno, o de ninguna categoría. Samu y Juampe aparecen como posibles, sólo posibles, novedades en el once.

Dos jornadas sin ganar, algo que no había sucedido en toda la temporada, y la forma en que dejó escapar dos puntos ante La Roda -tras encajar un gol en el minuto 88- han escocido en el vestuario de una Balona que madruga hoy para viajar a Cáceres, donde pretende reivindicar su condición de aspirante a todo. Los albinegros, que arrancan la jornada empatados en el cuarto puesto, mantienen la vitola de ser el tercer mejor viajero del grupo a pesar de haber perdido en sus dos últimos viajes (Granada y Cartagena) y aunque son conscientes de que enfrente tendrán un contrincante en línea ascendente, están decididos a esperar al San Fernando en la plaza VIP que habían ocupado hasta el último suspiro de la jornada del fin de semana. A ver si con eso consiguen enganchar a una afición que no termina de movilizarse.

Escobar, que generalmente no es muy amigo de rotaciones, se plantea cambios en el once de hoy, pero más por las extremas peculiaridades del campo de El Cuartillo -un terreno de rugby que se adapta cuando no queda otro remedio para albergar partidos de fúbol- que porque entienda que sus hombres precisan un descanso. El escenario del choque tienen tantas limitaciones que obliga a que se juegue a las 16:30 porque por carecer carece hasta de luz artificial.

El técnico dio a conocer la lista de convocados tras el entrenamiento vespertino de ayer y en ella hay dos novedades. Por un lado se caen Óscar Martín, por culpa de los problemas de abductores que ya obligaron a relevarle en la última jornada, y por otro Salvi, en el que el técnico parece estar perdiendo la confianza. Sus plazas en el autocar son para dos canteranos: Joe y el rondeño Raúl Segura.

En lo que se refiere a la alineación, el técnico parece apostar por la fuerza en un césped en el que cualquier intento de conducir el esférico es una temeridad. De hecho, Escobar insistió ante sus hombres en la necesidad de renunciar a las filigranas, especialmente a los que componen el paquete defensivo.

Lo que sí parece claro es que el entrenador no quiere desvelar la alineación. Todo indica que el quinteto de atrás es reafirmado en la titularidad (Lolo Soler, Manu Palancar, Olmo, Carlos Guerra, Javi Gallardo) y los cambios van a pasar por los que juegan por delante de ellos.

La opción que apunta con más fuerza es que ausencia de Óscar Martín provoque que vuelva al once un cuestionado Juampe, al que el propio presidente, Alfredo Gallardo, dio un tirón de orejas el pasado domingo. Alberto Merino y Chema Mato volverán a reunirse en el pivote central y Sergio Ortiz, al que los médicos insisten en la necesidad de dosificar, estará en el costado zurdo. Por delante, dos 'delanteros centros': Hugo Díaz y Samu.

Con todo, este once presenta varias alternativas y todas pasan por la presencia de Copi, que bien podría jugar en una banda, con lo que Juampe sería el sacrificado, bien hacerlo en su plaza habitual como media punta.

E incluso existe una tercera opción, en apariencia con menos posibilidades de verse plasmada, que sería la presencia de Ismael Chico en el centro, con Chema Mato haciendo las funciones de 'falso media punta' y un solo 'nueve', posiblemente Hugo Díaz, por delante de él. Un auténtico galimatías.