La crisis del rival, vista por dentro

Marbella. Tan cerca y tan lejos. Los malagueños han contado esta temporada con dos jugadores del Campo de Gibraltar, aunque no han coincidido en el vestuario. El meta sub-23 sanroqueño Guille Lara dejó el equipo en invierno (en lo más alto, por cierto) para incrustrase en la estructura del Málaga y en esa ventaja llegó al vestuario el defensa barreño José Luis Espinosa Tiri, que desembarcaba después de proclamarse campeón de la liga de India con el Atlético Kolkota. La suerte no ha acompañado al zaguero, que es incapaz de explicar a qué se ha debido el bajón protagonizado por su equipo en la segunda vuelta.

Marbella y Balompédica disputan el próximo domingo (18:00) un encuentro que durante muchas semanas unos y otros temieron que fuera trascendente para su futuro, pero que prácticamente carece de valor. Los malagueños, con su participación en la Copa ya garantizada, aspiran a despedirse de su afición con un triunfo. Pobre consuelo para un equipo que durante muchas semanas encabezó la clasificación.

"Admito que es algo inexplicable", comenta el futbolista de la Villa. "El equipo cuando yo llegué estaba muy bien, como una moto y es difícil determinar qué ha sido lo que nos ha pasado... al final incluso un cambio de entrenador, pero el caso es que de estar entre los cuatro primeros hemos visto hasta peligrar la Copa".

"La experiencia en el Marbella ha sido positiva a título personal, con un vestuario magnífico, aunque yo me voy decepcionado, pero conmigo mismo", reflexiona el jugador. "Posiblemente yo hubiese podido hacer algo más para tener más minutos, pero después de volver de India estuve más de un mes sin entrenarme con un grupo y yo creo que después me costó tiempo adaptarme para competir de igual a igual con mis compañeros".

Tiri desconoce cuál será su futuro, incluso si podría pasar por seguir en Marbella, pero deja claro que tiene "las puertas abiertas a cualquier oferta de España o en el extranjero" y que, lógicamente, la Balompédica es una opción que le agrada porque le brindaría la posibilidad de jugar cerca de su casa. "Nunca se sabe qué puede deparar el futuro".

Con respecto al duelo del próximo domingo, Tiri lamenta que se presuma una tarde un poco desangelada. "Yo era el primero que pensaba que llegaríamos a este partido con opciones de estar en liguilla o de buscar una mejor plaza entre los cuatro primeros y la verdad es que se presume un partido raro, pero seguro que los dos equipos saldrán a ganar y muchas veces sin la presión de los puntos se ven hasta buenos partidos así".

Precisamente el hecho de que el partido no ofrezca un premio importante para los locales va a propiciar casi con total seguridad que Tiri sea baja, ya que arrastra problemas en una rordilla.