El Algeciras CF SAD está en la recta final del largo y laborioso proceso burocrático que debe dar oficialidad a la transformación. El club del Nuevo Mirador aguarda el visto bueno definitivo en las próximas semanas aunque a todas luces ya funciona como una Sociedad Anónima Deportiva desde que arrancó la presente temporada. Los dirigentes albirrojos confían en que la SAD haya quedado registrada antes de terminar 2022.

El Algeciras de Félix Sancho atisba por fin la culminación de una conversión que ha tomado su tiempo aunque la parte más delicada, la de la suscripción de acciones, se realizó en el plazo más corto posible gracias a la implicación de los socios y al compromiso cumplido del ahora único accionista.

El paso de club a SAD, se puede decir ya, ha rozado lo faraónico (por lo dificultoso) en un Algeciras que desde la llegada de Sancho ha tenido que cubrir todo tipo de trampas para poner en orden una casa que sobrevivía en el alambre y, en cuanto a organización, estaba manga por hombros. El día a día en las oficinas del Nuevo Mirador ha dado un vuelco completo en apenas un año para sumergirse en una profesionalización que se aceleró el pasado verano con el aterrizaje de Ramón Robert para ocupar la necesaria figura del director general.

El barcelonés ejerce de mano derecha de Sancho en el Algeciras. El de Burgos está encantado con la labor del director general, sobre todo con "la seriedad" que ha inculcado en todas las paredes del estadio de La Menacha, que ya opera como una auténtica empresa, una empresa del fútbol que tiene como objetivo producir y sostener al Algeciras desde la rentabilidad.

El día que el anuncio de la SAD algecirista se haga oficial, probablemente a lo largo de este mes, los cambios en la institución van a ser más nominativos que en cuanto a funcionamiento. Lo que era una directiva de toda la vida pasa a convertirse en un consejo de administración, pero las cabezas visibles de ese organigrama ya están en sus cometidos.

Sancho, como ya ha señalado en varias ocasiones, quiere seguir teniendo cerca a los algecireños Nicolás Andión -el presidente institucional y el hombre que apostó por él en su día-, el abogado Miguel Ángel García Núñez o Nacho Castro, otra figura clave en la supervivencia del club desde 2008. A nivel interno puede que se produzca ajustes o incorporaciones, pero la esencia de los que siempre han estado al lado del club continuará de la mano de Sancho y Robert.

Aficionados del Algeciras en el estadio.

El algecirismo echa la mirada atrás y parece que ha pasado un mundo desde que en febrero de 2021 salió a la luz el nombre de Félix Sancho como el inversor que estaba dispuesto a echar una mano al Algeciras. El burgalés entonces fue determinante para salvar a un equipo que se quedó a las puertas del ascenso a Segunda en Almendralejo. Desde ese punto de inflexión, dio el paso definitivo para agarrar por los cuernos a un toro mucho más ingobernable de lo que se había imaginado.

Con la llegada de 2023 se cumplirán dos años de la aparición de Sancho en el panorama algecirista, dos años en los que el club ha burlado la quiebra, ha conseguido la ansiada conversión en SAD y ha subido su caché deportivo con un equipo que compite sin complejos en la Primera Federación y arrastra a más algeciristas que nunca al Nuevo Mirador.