El Algeciras CF tiene marcado en rojo un nombre propio para la planificación de la plantilla 22-23: David González Roni. El delantero, que tiene contrato en vigor para la próxima temporada, está considerado como una de las piedras angulares del proyecto que Iván Ania volverá a encabezar en la Primera Federación, esta vez en el remodelado grupo I.

Roni va a continuar en el Nuevo Mirador salvo sorpresa mayúscula a pesar del runrún de los rumores que han planeado desde que acabó la competición. El ariete ha sonado como apetecible para varios equipos, uno de ellos el todopoderoso Deportivo -que será rival de los albirrojos-, pero el Algeciras quiere convertir al ovetense en su jugador franquicia, en uno de sus intocables.

El goleador, el copichichi liguero de los algeciristas junto a Álvaro Romero, ha formado una de las grandes duplas ofensivas de la categoría. Ambos, tras la irrupción del canterano Álvaro Leiva, orquestaron uno de los ataques más atractivos y demoledores. Los tres futbolistas tienen contrato, pero el Algeciras sabe que va a ser difícil -por no decir imposible- mantenerlos en la nómina.

Los tres atacantes cuentan con pretendientes para cambiar de aires este verano. El Algeciras asume que el más joven, el diamante Leiva, terminará en un traspaso a un club importante. De todos es conocido el interés del Real Madrid, además de otras entidades de Primera, por un chico de 17 años internacional con la sub-18 que tiene todas las condiciones para dar el salto a la élite. En el caso de Romero, una vez más el sevillano vuelve a aparecer en la agenda de algunos conjuntos de Segunda aunque los clubes no están por la labor de pagar traspaso. El extranjero también ha tentado al delantero afincado en El Rinconcillo, que siempre se ha mostrado encantado de estar en Algeciras. Y llega la situación de Roni, el que menos ruido hace pero tan deseado o más que sus compañeros. El Algeciras ha rechazado ya alguna oferta por el goleador ovetense. Para el club es una pieza clave e intransferible para el proyecto que se está armando. Los de La Menacha no se plantean una salida de su '9'.

La importancia de Roni en el juego del Algeciras de Iván Ania el pasado curso fue palpable. El de Oviedo aterrizó tras jugar en Segunda con la UD Logroñés y se erigió desde primera hora en un jugador determinante para los albirrojos. Al margen de sus goles y su capacidad de definición dentro del área, el ariete sostuvo sobre sus hombros al equipo durante muchas jornadas.

Cuando Roni faltó, el Algeciras se resintió y, finalmente, el cúmulo de lesiones -entre ellas, la de Rafa Tresaco- provocó que el delantero llegase muy justo físicamente al momento decisivo de la temporada cuando unas molestias le dejaron en el dique seco varios partidos. Esa falta de frescura le pasó factura a un Algeciras que casi toda la competición estuvo con un solo punta nato.

Una de las claves a corregir en la actual planificación deportiva para la andadura 22-23 pasa precisamente por cubrirse las espaldas en un ataque donde los minutos deberán dosificarse algo mejor para afrontar con garantías los dos-tres últimos meses de Liga.