Jumilla: a flote a pesar de todo

El Algeciras CF visita mañana a un equipo que se encuentra sin entrenador oficial -mañana será la tercera jornada seguida-, que se ha cobrado ya a tres técnicos y a media plantilla y que ha pasado por las manos de tres grupos distintos de dirigentes en la presente temporada. Y a pesar de todo, el FC Jumilla compite y da la cara en el terreno de juego, donde ha protagonizado una gran reacción para salir de los puestos de descenso, donde sólo ha perdido un partido en los últimos siete y donde no sufre una derrota como local desde el 25 de octubre.

Los algeciristas han sido advertidos por su técnico durante la semana para que la situación extradeportiva del Jumilla no camufle su capacidad cuando rueda el balón. Enfrente habrá un rival que en el campo se abstrae de toda la ciclogénesis institucional que vive la entidad murciana prácticamente desde que ascendió el pasado verano.

Cuando el Algeciras se topó con el Jumilla en la primera vuelta lo hizo en dos ocasiones. La primera vez fue a mediados de octubre cuando una tromba de agua obligó a suspender el duelo en el Nuevo Mirador a falta de 27 minutos para el final con el cero a cero inicial. No debió jugarse más allá del descanso. Jordi Fabregat dirigía al cuadro blanquiazul. No ocurrió así el día de la reanudación, el 10 de diciembre, cuando el Jumilla llegó con José Joaquín Moreno Josico en el banquillo. Santi Luque hizo el gol del triunfo albirrojo aquella tarde noche de alegría.

El conjunto vinícola, que en verano había sufrido la marcha inesperada del grupo inversor italiano llegado tras el ascenso, aguantó a duras penas con una gestora que acumuló retrasos en las nóminas. No obstante, el cambio de año trajo la llegada de un nuevo grupo de dirigentes llegado desde Italia y encabazado por Nobile Capuani. El nuevo presidente otorgó la dirección deportiva a su compatriota Salvatore Casapucca, exjugador del Perugia. El Jumilla comenzó a ponerse al día en lo económico e incluso se sumergió de lleno en el mercado de fichajes. Aterrizaron refuerzos exóticos como Evans Kondogbia-hermano del exsevillista-, Álex Capozzi, Francesco Vedone o Christensen... y otras incorporaciones más contrastadas para la categoría como Neftalí o el exbalono Rubén Cuesta, de vuelta a España tras su periplo por Bolivia. El club, lógicamente, abrió la puerta a varios jugadores, entre ellos, al exalbirrojo Carlos Fernández.

El Jumilla comenzó a despertar en cuanto a resultados. Tras el revés en el Mirador y la goleada encajada en Carranza tres días después, el punto de inflexión se produjo al remontar in extremis a la Balona el 20 de diciembre, un marcador que le costó el puesto a Rafa Escobar en el banquillo de los linenses. Los vinícolas, de la mano de Josico, sacaron puntos y resultados sorprendentes como el empate ante el UCAM o las victorias ante el Jaén o en Huelva ante el Recreativo.

Todo marchaba sin embargo tras el triunfo en Huelva, los nuevos rectores suspendieron de empleo y sueldo a Josico, una noticia que convulsionó el entorno. El conflicto se ha convertido en culebrón y está en manos del Comité Jurisdiccional de la Federación Española, que ha dado plazo al Jumilla para que presente alegaciones. Capuani mantuvo que el contrato que une a Josico con el club hasta verano de 2017 no debe tener vigencia al haber sido falsificada una firma, aunque en tierras murcianas dan por hecho que la razón caerá de lado del técnico.

El murciano Paco Pliego se hizo cargo del equipo pero tras el duelo en Granada de la pasada jornada abandonó. El técnico, que fue advertido dos veces por la Federación Española al dirigir sin licencia tramitada, se marchó y acusó al director deportivo de hacer los cambios en el último encuentro. El utillero y segundo entrenador, el italiano Gianluca Castellano, que estaba a cargo del filial autonómico, tomó los mandos esta semana de las sesiones de trabajo. La entidad ya ha sido multada las dos últimas jornadas por no presentar técnico y mañana se enfrenta a la tercera sanción.

Y cuanto a la clasificación, el rival del Algeciras se encuentra fuera del descenso con 29 puntos, uno por encima de la promoción que ocupa el San Roque de Lepe y a sólo tres de los albirrojos. Los blanquiazules acumulan ocho partidos en casa sin perder desde el 0-4 del Marbella el 25 de octubre. Antes sólo el UCAM fue capaz de ganarles. Motivo de más para extremar precauciones.