La Real Balompédica, que ya sabe que no podrá asaltar el liderato del grupo IV de Segunda B, defiende hoy (18:00) en el Romero Cuerda de Villanueva de la Serena (Badajoz) su condición de equipo en puesto de liguilla. Lo hará ante un Villanovense venido a más y con las bajas de Olmo, Gato y Sergio Molina. El partido resulta especialmente emotivo para el técnico balono, Julio Cobos, al que la afición local rinde pleitesía después de su paso por el banquillo serón.

La Balompédica -que sólo ha perdido un partido como visitante, pero que sólo ha logrado un triunfo en las últimas cinco jornadas- visita a un Villanovense que encadena seis semanas sin perder. Los albinegros afrontan el duelo con dos puntos de ventaja sobre los serones, que pretenden desbancarles de la zona VIP de la clasificación.

Un duelo que se presume igualado en un escenario muy peculiar que sin embargo no se le ha dado nada mal a los linenses desde que el conjunto serón disfruta de su actual denominación, o lo que es lo mismo desde que en 1992 se convirtió en el heredero del extinto CD Villanovense.

El equipo de La Línea protagonizó ayer una última sesión prepartido diríase que casi exótica. Por un lado porque se desarrolló en el césped del Municipal, algo que no sucedía desde las primeras semanas de competición y por otro porque lo hizo bajo una temperatura que incluso iba más allá de lo primaveral, lo que desde luego no es nada normal en el último tramo del mes de octubre.

La jornada de trabajo sirvió para corroborar algo que ya se sabía desde el pasado jueves, que no estaban en disposición de desplazarse Olmo y Gato -que sí que jugaron el pasado domingo ante el UCAM- ni Sergio Molina, ausente por segunda semana consecutiva.

Como es norma en Julio Cobos, el entrenador no dejó entrever una sola información en cuanto a quiénes conformarán el once inicial.

De ahí que no se pueda afirmar con seguridad quién acompañará a Joe en el centro de la retaguardia, porque parece descabellado que el central linense, que está a un nivel excelente, pueda ser sactrificado. Una opción para cubrir la baja de Olmo es el regreso de Dennis Nieblas, que se cayó del once el pasado domingo. La otra, la vuelta de Mario Gómez, cuyo debate por lo extraño de su reiterada ausencia abrió este periódico durante la semana para que luego se contagiaran otros medios. "Prensa rosa", bromea el técnico al respecto.

Todo indica que las bandas serán para Zamorano y José Ramón -otro que volvería para ocupar la vacante de Gato- que Juampe seguirá desenvolviéndose como segunda punta y no sería nada de extrañar que Wilson Cuero relevase en punta de lanza a Stoichkov, relevado el pasado domingo durante el encuentro.