"Celebré el ascenso de la Balona como un aficionado más"

José Antonio Luque es un balono confeso. Lo es desde que en la 1999-2000 se enroló en la Real Balompédica para defender la portería. De aquello ha pasado ya poco menos que una década. Llover, lo que se dice llover, no es que haya llovido tanto. Ni siquiera lo suficiente como para hacer cambiar de principios al cancerbero de Marchena, que asegura que el pasado mes de junio celebró el ascenso albinegro en Miranda de Ebro "como un balono más". No en vano, unas semanas antes fue a ver el partido que el equipo de Baby disputó en Cartaya como un seguidor cualquiera.

Luque, que comienza su segunda andadura en el Écija Balompié, hace ahora todos los esfuerzos que están a su alcance para poder debutar el próximo domingo ante la Balona, porque una lesión muscular le ha impedido jugar hasta ahora, en beneficio de Arturo, ex del Extremadura. Durante dos horas no le quedará otra que renunciar a los sentimientos que le unen al equipo de La Línea. "Ya estoy entrenando con normalidad, pero la decisión ya se sabe que le corresponde a Pedro [Buenaventura]", advierte el meta.

"Una vez pase el partido del domingo puedo asegurar que le deseo a la Balona que gane todos los domingos", recalca. "Yo soy un balono más, siempre llevaré a ese equipo en el corazón, porque fue allí donde jugué la primera vez que salí de casa y aún mantengo buenas amistades, porque me trataron muy bien".

"Además estoy convencido de que han hecho un buen equipo, con excelentes jugadores, y aunque mirando la clasificación pueda parecer lo contrario, no han tenido un mal comienzo de temporada", subraya.

"Sólo he jugado contra la Balona una vez, en un trofeo, pero no es lo mismo", recuerda. "Para mí verme con la Balompédica siempre será especial, porque de verdad que tengo un recuerdo muy bonito de todo aquello".

"Lamentablemente en el aspecto económico las cosas no fueron nada bien, porque estuvimos siete meses sin cobrar, que ya está bien, pero en lo deportivo empezamos titubeantes, pero acabamos séptimos y el ambiente dentro del vestuario era fenomenal", repasa.

"Fue un experiencia tremenda en lo personal y en lo deportivo", insiste el guardavallas. "Suponía irme fuera de casa por primera vez y recién casado, conocer un club más humilde que el Sevilla, jugar en un ambiente nuevo y todo resultó fenomenal".

Después de aquello, experiencias buenas y malas tanto en Segunda como en Primera de la mano del Recreativo, donde llegó a coincidir con el linense Juan Merino y con el hasta hace muy poco capitán balono Miguel Ángel Espínola ("no sabía que se había marchado y me preguntaba por qué no estaba jugando") y la vuelta al Écija.

"Tengo una edad, dos hijos que ya son mayorcitos y he preferido volver a casa, porque estoy viviendo en Marchena, que andar dando tumbos sin saber qué va a pasar", explica. "Ya he conocido el fútbol de élite, pero he antepuesto los intereses del club a los míos, especialmente en el Recre, porque me sentía muy identificado, y ha llegado el momento de mirar más por mí, de disfrutar del fútbol y de poder disfrutar también de mi familia".

Las dos derrotas sufridas por el Écija en el arranque liguero no son, en opinión de Luque, síntoma de nada. "Todos sabemos que en Segunda B la figura del delantero es fundamental y si a cualquier equipo le quitas a dos de sus hombres gol, como nos está sucediendo a nosotros con Paco Luna y David Hernández, se resiente".

"De todas formas el Jaén no mereció ganarnos y en Ceuta el marcador, por lo abultado, es engañoso", matiza. "Yo creo que el Écija cuenta con un buen equipo y que va a dar guerra en la competición".