El Cacereño se marcha de su estadio por temor a que se produzca una tragedia
El club exige al Ayuntamiento que arregle la instalación a pesar de que no es municipal
Lo que, de momento, no ha llegado a pasar en La Línea porque el Ayuntamiento acometió las obras que exigía la subdelegación del gobierno, sí que ha sucedido en Cáceres. El CP Cacereño no jugará el próximo domingo en su estadio Príncipe Felipe ante el Melilla, sino en Miajadas. Y el club, a pesar de que el campo no es de propiedad municipal -como sí que sucede con el linense- dice que no regresará a su instalación hasta tanto la alcaldesa, Elena Nevado, "firme que se hace responsable si ocurre una desgracia".
La problemática en Cáceres, cuyo campo también está especialmente maltrecho, se agudizó el sábado. El temporal desplomó una de las torretas de la luz artificial -imagen de la que se hizo eco este periódico- y las alarmas se dispararon. La diferencia con La Línea es que el campo no es del municipio y a eso se agarra la alcaldesa: "El estadio es privado. Si se hubiera caído el muro de la terraza de mi casa, nadie entendería que yo pidiera al Ayuntamiento que me lo levantara", ejemplificó Nevado en declaraciones a El Periódico de Extremadura, para incidir después: "El estadio es una propiedad privada que vale mucho dinero, porque la parcela tiene incluso uso comercial, tiene unos propietarios, que es una sociedad anónima deportiva, que sirve a los empresarios para cuadrar sus impuestos, que no se nos olvide".
La alcaldesa dijo estar con el Cacereño "a muerte" y recordó: "Todo el mundo en esta ciudad sabe que yo soy una aficionada , no de ahora, sino desde niña. Somos socios del Cacereño, mi marido tiene su abono de temporada y esa es la forma de colaborar que hay, como aficionados, siendo socios, apoyando y abonando las cuotas, que es como se levanta un club".
Por su parte el consejero delegado, Antonio Martínez Doblas, explica: "En el Príncipe Felipe no se puede jugar. Yo no me puedo hacer responsable de que pase algo y no volveremos a jugar allí". "El Cacereño es un sentimiento y yo el único tonto que compró las acciones para poner mi granito de arena en hacer un equipo que pasee el nombre de Cáceres con orgullo".
No hay comentarios