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La Balona 2013-14, a por la austeridad

El presidente, Alfredo Gallardo, se reunirá la próxima semana con socios, abonados y aficionados para exponerles la necesidad de afrontar la próxima campaña con un recorte presupuestario de hasta 100.000 euros

Los componentes de la última alineación de la temporada posan con los más jóvenes de la entidad, el pasado domingo.
Rubén Almagro La Línea

21 de mayo 2013 - 05:02

El presidente de la Real Balompédica, Alfredo Gallardo, convocará la próxima semana a socios, abonados y aficionados en general a una reunión informativa en la que anunciará un importante recorte en el presupuesto de cara a la próxima temporada (alrededor de 100.000 euros) y las líneas maestras de la confección de la plantilla que defenderá los colores albinegros en la 2013-14, que, salvo sorpresa mayúscula, volverá a estar al cargo del cordobés Rafa Escobar.

La directiva de la Balona no ha esperado ni 24 horas para, tras quedar fuera de la fase de ascenso a la Liga Adelante, sacar del cajón del proyecto de la campaña venidera, que viene elaborando desde hace meses con un objetivo claro: la austeridad.

Las taquillas de la andadura que finalizó para la Balona el pasado domingo han estado muy por debajo de lo presupuestado, como consecuencia de la delicada situación económica que atraviesa la ciudad, y eso obliga a la directiva o bien a subir los precios de los abonos bien a disminuir los gastos.

Lo más probable es que sea cual sea la postura de los hinchas, el club tenga que disminuir el capítulo de inversiones en unos 100.000 euros para el presupuesto quede establecido en alrededor de 400.000. Todo esto lo expondrá Alfredo Gallardo a los aficionados la próxima semana en una reunión abierta y será entonces cuando, de común acuerdo, se fijen las líneas maestras.

En cualquier caso, en lo que se refiere a la plantilla, que es ahora lo que más inquieta a la hinchada más fiel, las decisiones están consensuadas con el preparador. La Balompédica establecerá una fecha límite (posiblemente a mediados de junio) para que Rafa Escobar pueda aceptar una oferta en caso de que ésta se produzca, pero si para entonces no lo ha hecho tendrá que respetar el año de contrato que le une a la entidad. En ese espacio de tiempo, empero, trabajará para la Balompédica.

Una cosa parece clara, no habrá sorpresas y futbolistas como el venezolano Francis Fajardo, el centrocampista Curro y el meta Mikel Pagola dejarán de pertenecer a la entidad porque no cuentan con la confianza del preparador, como ha quedado demostrado en el último tramo de la competición.

La intención de la directiva es que un grupo notable de jugadores de La Línea y de la comarca sigan en la caseta. Es el caso de los Mateo, Carlos Guerra, Olmo, Javi Gallardo, Dani Gallardo, Joe, Ismael Chico y Alberto Merino. A esa relación hay que unir los nombres de Mario y Ezequiel, que acaban contrato y a los que la directiva hará una oferta para que sean ellos quienes determinen si, con esas nuevas condiciones, continúan.

Copi seguirá en la Balona pero el presidente le exigirá una mayor implicación mientras que está por determinar si Juan Ayala tendrá una nueva oportunidad o se marchará cedido, muy posiblemente al San Roque en caso de que Diego Pérez Yiyi dé el visto bueno.

En la lista de los que tienen todas las opciones de seguir vinculados a la centenaria entidad linense también se encuentran los malagueños Rafa Villén y Salvi, que cumplirán su segundo año de contrato después de un primero que les ha servido, especialmente, para madurar como futbolistas y para vivir la experiencia que supone vivir fuera de casa.

Bello, Juampe Rico, Rubén Cuesta y David Hernández viven, por su parte, una situación casi idéntica. El presidente ya los ha tanteado y su continuidad está más que complicada, porque algunos clubes ya han comenzado a pegar en sus puertas con ofertas que casi con total seguridad la Balompédica no va poder igualar.

Existe una remota posibilidad de que el tarifeño Juampe siga en La Línea, pero no deja de ser eso, una opción.

En cualquier caso, los dirigentes están decididos a no conceder prórrogas como las de la temporada pasada, en la que hubo jugadores que decidieron su futuro cuando el resto de la plantilla ya estaba entrenándose, caso de Antonio Ocaña.

La Balompédica establecerá, como en el caso de Escobar, una fecha límite para la respuesta y pasado ese día, descartará automáticamente la renovación de cualquier futbolista que no haya respondido al ofrecimiento de la entidad.

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