Una vez cobrado, los trabajadores hacen números. La retirada de varios pluses y complementos tras la derogación del convenio colectivo municipal ya es efectiva una vez que los empleados públicos de Los Barrios han recibido las dos primeras nóminas con este recorte, las correspondientes a mayo y junio. La reducción del salario oscila entre los 186,20 euros para todos los trabajadores por la inaplicación del plus de funcionalidad y alcanza los 409,07 si a esa deducción se suman la retirada del plus de turnos en su máxima cuantía y una compensación por trabajar seis días más al año en lugar de vacaciones -aplicado a varios agentes de la Policía Local- valoradas, respectivamente, en 184,11 y 38,76 euros. Todas son cuantías brutas.

Los trabajadores más afectados son, por tanto, policías locales con el turno de mañana, tarde y noche en distribución de tipo seis-cuatro (seis días de trabajo y cuatro de libranza). También perjudica a personal de servicios básicos a turnos y con jornada especial o en festivos como la limpieza viaria y ordenanzas de instalaciones deportivas encargados de su apertura vespertina.

El alcalde, Jorge Romero, mantuvo por la mañana un encuentro con agentes de la Policía Local, uno de los colectivos más agraviados por la retirada de estos pluses. El presidente de la junta de personal, Raimundo Pérez (CSIF), explicó a su término que los agentes se mostraron muy descontentos con los recortes. El pasado agosto llegaron a plantear la posibilidad de patrullar sólo en horario de oficina, de ocho a tres de la tarde, por corresponderse con el salario resultante de la merma salarial ahora confirmada. La posibilidad de llegar a esta medida se debatirá en una próxima asamblea del colectivo, sin menoscabo de una denuncia ante los juzgados que prepara el sindicato.

Así mismo, CSIF criticó que también existe una aplicación irregular del complemento específico que lleva a que trabajadores de categorías diferentes (E y C1) lo cobren con idéntica cuantía e incluso superior. "El alcalde hace alusión a que la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) permitirá regularizar estas cuestiones, pero nosotros insistimos en que se debe aprobar un acuerdo transitorio. La turnicidad debe abonarse", subrayó Pérez.

Desde la UGT, Manuel Andrades resaltó que tanto su sindicato como CCOO están dispuestos a retomar el diálogo social para negociar un nuevo convenio tal y como pidió el alcalde el viernes ante los trabajadores. "Eso sí, nos pide que depongamos nuestra actitud. Nos deben dos nóminas y nos acaban de pagar mayo y junio estando ya en septiembre, no querrá que le esperemos en la puerta del Ayuntamiento con pastelitos", ironizó Andrades.

Romero, ya adelantó en la reunión con trabajadores municipales del pasado 26 de agosto las nóminas de mayo y junio iban a ser las primeras con los recortes debido a que el anterior regidor, Juan Montedeoca, no las había firmado y constaba un informe de reparo por parte de la Intervención debido, precisamente, a la existencia de los pluses y su concesión arbitraria. Romero fue tajante en ese momento al afirmar que no iba a rubricar un pago con informes negativos. Precisamente ayer el Ayuntamiento pasó a deber dos nóminas al sumar el devengo de agosto al impago de julio, en la misma jornada en la que terminaron de cobrar los empleados con cuenta en entidades bancarias distintas a Cajasol, pagadora de los sueldos de mayo y junio gracias a un crédito de 1,5 millones.

Por su parte, el colectivo de limpiadoras de colegios adscritas a la empresa municipal GAMA continúan con la huelga indefinida emprendida el pasado jueves 1. Ayer mantuvieron una concentración a las puertas del colegio Juan González y harán otra mañana miércoles ante el San Isidro. Las 16 empleadas cumplen con los servicios mínimos del 50% de la actividad pese a que el Consistorio ya les ha entregado las cartas de despido con efectos a partir del viernes 9 y sostienen que a partir del 12 serán sustituidas por personal municipal. Una situación que ya se ha puesto en conocimiento de la Inspección de Trabajo.