Un mes después de que el senador Nicolás Fernández Cucurull denunciara públicamente que el Gobierno había ejecutado sólo el 83% de las inversiones previstas, el delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, citó a los periodistas para dar su versión de los hechos. Según él, la acertada y la exacta, porque se presenta con todos los datos recibidos, con las memorias ya cerradas y no con avances que resultan erróneos.

Así las cosas, dejando claro hasta la saciedad que el senador Cucurull le cae muy bien, que le tiene mucho aprecio y que es un buen parlamentario y mejor persona, el utrerano negó la mayor indicando que no es que no se haya invertido lo previsto, sino que, muy al contrario, se ha invertido más. "De cada cien euros previstos se han invertido 135'86", destacó. Ese superávit tiene una explicación, ya que al margen de la inversión prevista para Ceuta se han tenido en cuenta otras consideradas extra, como las relacionadas con las partidas correspondientes a las lluvias torrenciales o las repartidas entre distintas comunidades autónomas. Esto ha provocado que se hayan invertido siete millones más de los previstos inicialmente, haciendo un global de casi 27 millones. Según Fernández Chacón, desde el periodo 2004 hasta el 2008 -correspondiente con gobiernos socialistas- siempre se ha ejecutado más de lo previsto. Un 85% en 2004, un 171% en 2005, un 114% en 2006, un 102'7% en 2007 y un 135% el pasado año. Sin acritud y respetando la figura de Fernández Cucurull, el delegado recordó la última cifra de inversión del PP, en el año 2003, que se materializó en un 79'81%.

"He esperado lo que corresponde", indicó Chacón, aludiendo a su tardanza en ofrecer los datos de inversión real, que no contemplan las inversiones del sector empresarial, Tesorería de la Seguridad Social y capítulo de vivienda.

¿Por qué el senador por Ceuta se equivocó? Fernández Chacón tiene la respuesta. Porque cometió dos errores de bulto, lo que dio lugar a un razonamiento falso. Primero, no esperó a tener todos los datos al completo, interviniendo mediáticamente con datos cerrados a octubre. Segundo, se equivocó y confundió la distribución orgánica, que es a la que hace referencia la Intervención del Estado, con la regionalizada, que suelen utilizar los parlamentarios. En la primera, no aparecen contabilizadas las inversiones que se ejecutan en varios territorios, de ahí que el parlamentario no las tuviera en cuenta. Eso sí, Fernández Chacón insistió en que los errores del senador no habrían sido intencionados "porque es una buena persona y un buen parlamentario" aunque "no fue prudente" en su exposición adelantada de los datos económicos.