Mientras la Comisión Europea (CE) y Reino Unido reanudaban en Londres las negociaciones para suprimir la Verja de Gibraltar, el paso fronterizo ha soportado por tercer día consecutivo largas retenciones de vehículos coincidiendo con la salida hacia La Línea de miles de trabajadores, la mayoría de ellos españoles, tras cumplir con sus jornadas laborales en el Peñón. 

Tanto el carril exclusivo para motocicletas como los seis destinados a los coches particulares y vehículos comerciales permanecieron más de dos horas colapsados, desde poco antes de las cuatro de la tarde hasta casi las 18:45. Según algunas de las personas atrapadas en el atasco, este obedece a varias causas, aunque este miércoles la principal fue que las autoridades gibraltareñas taponaron la salida de las motocicletas al dejar pasar a los coches de dos en dos. 

Colas en la Verja.

Muchos trabajadores transfronterizos han detectado además un descenso en el número de efectivos policiales gibraltareños en la zona. 

Las colas en la Verja a causa de la gestión de Gibraltar del paso se reproducen periódicamente desde el pasado mes de septiembre, casi siempre originadas en el carril para motos que utilizan los trabajadores españoles. Ya entonces, la Asociación Socio Cultural de Trabajadores Españoles en Gibraltar (Ascteg) pidió explicaciones al Gobierno del Peñón por los atascos. Todo comenzó cuando, en agosto, España separó los vehículos de cuatro ruedas de los de dos con intención de agilizar el paso. Gibraltar no se adaptó en ese momento al cambio y ni siquiera reforzó el carril con un agente.    

El carril de motos a la salida hacia La Línea.

Semanas después, el Gobierno gibraltareño explicó que la aplicación del Código de Fronteras Schengen a los no gibraltareños está provocando acumulaciones en diferentes momentos.