El TSJA ratifica la nulidad de las contrataciones del personal de confianza
Tres de los cuatro implicados en la denuncia iniciada por el PIBA 2000 cesaron de su cargo al concluir el anterior mandato
Miguel Domínguez Conejo, portavoz del PIBA 2000, expresó ayer su satisfacción por la sentencia de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superio de Justicia (TSJA), que ha ratificado la nulidad de las contrataciones del personal de confianza llevadas a cabo por el alcalde, Jorge Romero, durante su primer mandato.
Esta resolución da por buena la sentencia que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Algeciras dictó el pasado 30 de abril sobre este mismo caso; y desestima el recurso de apelación que presentaron el Ayuntamiento y los trabajadores afectados. Esta sentencia se remonta a una denuncia realizada por el PIBA 2000y el ex alcalde socialista, que en mayo de 2013 recurrió las contrataciones como personal de confianza de Camilo José Lara Fernández, nombrado director técnico de Políticas Económicos-Financieras y Presupuestarias y coordinador del Área de Recursos Humanos; Evaristo Ramos Alcoba, que fue contratado como director técnico de Administración Pública y coordinador del Área Jurídica; Agustín Llorens Tonda, nombrado técnico auxiliar de Modernización y Administració Pública, e Iván Calderón Carrillo, técnico auxiliar de Políticias Económico-Financieras, Presupuestarias y Recursos Humanos.
El PIBA declara que la sentencia del TSJA pone de manifiesto que la incorporación de estas cuatro plazas al personal de confianza se tramitó sin informe técnico alguno; que se llevaron a cabo fruto del pacto político entre PA y PP; y para desempeñar tareas que son competencias de los funcionarios municipales de carrera y no propias del personal de confianza. Domínguez Conejo declaró que "lo que pretende el equipo de gobierno es evitar los controles de los funcionarios públicos habilitados", concluyó.
El alcalde, Jorge Romero, informó que solo uno de los incluidos en esta denuncia permanece aún en el Ayuntamiento como personal de confianza, pero con otras tareas asignadas. Es el caso de Evaristo Ramos Alcoba, nombrado jefe del gabinete de Alcaldía. El resto cesaron de sus puestos al concluir el anterior mandato municipal. El alcalde manifestó ayer que "la única intención del PIBA 2000 con esta denuncia es paralizar la gestión municipal y mantener al equipo de gobierno con las manos atadas", dijo.
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