Ledesma indica que vive de sus pequeños ahorros y niega ser el protector de nadie

El portavoz de Unidad por San Roque (USR) en el Ayuntamiento, José Antonio Ledesma, mostró ayer su malestar por las declaraciones del alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, en referencia al PGOU. El edil de USR consideró que son un ataque personal y frontal hacia su persona.

En un comunicado, Ledesma manifestó que nunca ha sido protector del arquitecto redactor del PGOU, Luis Recuenco. Añadió que ha defendido y seguirá defendiendo los derechos de los ciudadanos y los intereses generales de la ciudad. "Si el alcalde tiene algo que manifestar en mi contra, que acuda de modo inmediato a los juzgados", le retó el edil, quien acusó a Ruiz Boix de "estar nervioso, alterado y con falta de respeto a los técnicos municipales y al propio director del PGOU por cuestiones de "su propio interés que él sabrá como explicar a los ciudadanos".

Con respecto a su trabajo, confirmó que está en excedencia desde el 1 de enero de este año, una posición a la que se acogió de acuerdo con el alcalde de Castellar, municipio en el que tiene una plaza en el Ayuntamiento. Ledesma considera que es la mejor opción en estos momentos de crisis municipal y después de 29 años de cotización en la Seguridad Social. "Necesitaba de un tiempo personal por asuntos de mi sola incumbencia para descansar y además recuperarme de una grave enfermedad de la que fui intervenido en estado crítico en octubre de 2011", aclaró Ledesma.

Además, informó que vive de sus pequeños ahorros "después de casi 30 años de trabajo y de esfuerzo personal y honrado. Algo que no sé si podrá manifestar de la misma manera el alcalde, con su tren de vida y su poco tiempo de trabajo y de vida profesional".

Por otra parte, el concejal y presidente de USR consideró "absolutamente despreciable" que el alcalde entre en asuntos de ataque personal contra los ediles que conforman la Corporación. "Lamento que mi pueblo tenga a un alcalde tan maleducado y déspota. Él mismo se autocalifica y se desprecia", añadió José Antonio Ledesma, quien concluyó que el primer edil ha perdido "la poca credibilidad que le pudiera quedar y lo poco de ético y respetuoso que tiene hacia las personas".