¿Halcones en la PLAZA ALTA?
patrimonio
El Ayuntamiento de Algeciras estudia el uso de rapaces para ahuyentar a las palomas, que dañan la cerámica de la fuente
Este método se utilizó hace unas semanas en el colegio Puerta del Mar
Hace medio siglo, los militares de la base de Torrejón de Ardoz contactaron con el respetado naturalista Félix Rodríguez de la Fuente. Querían su ayuda para evitar los problemas que causaban las aves a sus cazas en las maniobras de aterrizaje o despegue. De la Fuente, un enamorado de la cetrería, propuso entonces utilizar halcones para ahuyentar a las aves en la llamada operación Baharí y poco después ese mismo sistema se implantaría en el aeropuerto de Barajas para evitar choques de los pájaros con los aviones o la absorción involuntaria en los motores.
Desde entonces, este arte milenario, declarado patrimonio inmaterial por la Unesco, ha sido empleado en aeropuertos, en estadios o en otros equipamientos para evitar las interferencias o daños que pueden causar las aves. El precursor, la plantilla alada de Barajas, sobrepasa ya los sesenta halcones en vuelo diariamente para mantener el espacio aéreo de las pistas libre de aves. El uso de aves rapaces se ha extendido y ahora podría llegar hasta un sitio inesperado: la Plaza Alta de Algeciras.
En el céntrico enclave la abundancia de palomas se ha convertido en un problema para la conservación de uno de los lugares emblemáticos de la ciudad. Las aves y sus excrementos han venido provocando daños en la cerámica del entorno, por lo que el Ayuntamiento de Algeciras, en el marco de los trabajos para la restauración de la fuente, está estudiando las diferentes alternativas posibles para evitar que estos animales sigan deteriorando el conjunto monumental.
"No significa acabar con las palomas, sino ahuyentarlas a otros lugares donde hagan menos daño", explica la teniente de alcalde delegado de Cultura Pilar Pintor. En diferentes ciudades se están tomando diversas medidas, desde métodos esterilizantes, como el pienso, a disuasorios, pero "parece que la cetrería es el que más se utiliza". No obstante, recuerda Pintor, el uso de las rapaces no se puede hacer libremente, sino que hay que contar con las autorizaciones pertinentes por parte de la Junta de Andalucía.
No sería la primera vez que el Consistorio acude a esta técnica para solventar un problema con aves. Hace solo unas semanas se empleó la cetrería en el colegio Puerta del Mar, que estaba teniendo problemas de higiene, seguridad y salud por la abundancia de gaviotas. La empresa Águilas del Estrecho está utilizando para evitar su presencia un halcón y un águila, que asustan a las gaviotas. Lo está haciendo de forma intensiva durante un mes y habrá sesiones de mantenimiento posteriormente.
El sistema a utilizar en la Plaza Alta sería similar, si finalmente es el elegido. El fin último es evitar el deterioro de la fuente, bancos y balaustrada después de la intervención de restauración que se está efectuando en los dos primeros y se prevé ejecutar en un futuro sobre la tercera.
La actuación sobre la fuente de la Plaza Alta está a punto de finalizar. Acabaron las labores de fontanería y el Consistorio ya tiene las nuevas piezas fabricadas en Cerámica González de Sevilla para sustituir aquellas que estaban en peor estado. El coste total de la actuación ha sido de 60.000 euros, sufragados por la Diputación Provincial. El Ayuntamiento está preparando también una exposición sobre la historia de este espacio clave para la ciudad, para la que está recolectando fotografías, planos, prensa.. Uno de los aspectos que se tratará es precisamente todo el proceso de restauración y las medidas preventivas a adoptar para cuidar el patrimonio, explica Pintor.
No hay comentarios