Los siete ayuntamientos del Campo de Gibraltar aumentaron su endeudamiento con los bancos en 187,1 millones de euros a lo largo del último mandato municipal, lo que supone un 52% más hasta situar el total en 541,6 millones de euros (354 millones cuatro años atrás), según la comparativa de los datos de deuda viva difundidos recientemente por el Ministerio de Hacienda.

A lo largo de estos últimos cuatro años, sin embargo, el comportamiento de los municipios con los bancos ha sido dispar; desde la práctica amortización de todo el débito en San Roque a la multiplicación por cuatro en Tarifa. En resumen, cuatro de las siete localidades vieron subir su nivel de endeudamiento bancario: Algeciras, La Línea, Los Barrios y Tarifa. En el resto, bajó.

La deuda viva, como concepto, contabiliza las obligaciones pendientes de las operaciones de crédito de los municipios, las que están proyectadas y los avales concedidos. Por lo tanto, en esta millonaria cifra global entran los créditos concertados por motivos tan dispares como los solicitados para comprar equipamientos y también -y es una de las razones en las que se sustenta el crecimiento de los últimos cuatro años, sino la principal– las diferentes líneas de crédito del Gobierno a través de instrumentos como el fondo de ordenación, el pago a proveedores o los acuerdos con varios consistorios para saldar a plazos las deudas arrastradas con la Seguridad Social y Hacienda.

Los datos están contabilizados a 31 de diciembre de 2018 y la misma fecha de 2014, el periodo más cercano al mandato municipal que comenzó en junio de 2015 y concluyó con las recientes municipales del 26 de mayo. Los datos de Tesorillo no están desglosados de los de Jimena porque el nuevo municipio apenas tenía dos meses de existencia.

Muchos de estos municipios ya tenían estos niveles de deuda, pero computada de otra manera mediante sentencias judiciales pendientes y calculadas pero sin fallar, o con facturas en los cajones. Es el caso Los Barrios y La Línea, que ya contaban con un nivel de endeudamiento elevado pero disperso y que ahora están agrupadas como deuda bancaria y, por tanto, deuda viva.

Deuda viva en los ayuntamientos del Campo de Gibraltar.

Por localidades, en Algeciras la deuda viva pasó de 169,4 millones a 196,8 millones un 15,7% más (+26,7 millones). En el último año, de 2017 a 2018, pasó de 176,8 a los ya citados 196,8. Ello se debe a que el Ayuntamiento se acogió a dos líneas extraordinarias del fondo de ordenación. Previamente, Algeciras se acogió en el pago a proveedores (antes de 2014).

En La Línea, la reestructuración de la deuda llevó a pasar de 87,6 a 149,4 millones (+70,5% y 61 millones de euros más) en cuatro años. Durante el último ejercicio prácticamente se mantuvo, ya que en 2017 había 148,4 millones de créditos bancarios.

San Roque es uno de los casos dignos de estudio. Pasó de 32,1 millones de deuda bancaria a solo 177.000 euros gracias a una amortización que se efectuó en varias tandas y, a efectos prácticos, supone débito cero.

En Los Barrios pasó lo contrario. Varias sentencias, pagos a proveedores y la reestructuración llevaron a crecer la deuda viva un 185,4%, de 53,6 millones a 153,1 (+99,4 millones). El actual alcalde barreño, Miguel Alconchel, defendió a principios de año en una comparecencia para hacer balance del mandato con el entonces alcalde, Jorge Romero, que Los Barrios debe ahora más a los bancos pero a cambio ha logrado unificar casi toda como créditos con el aval del Estado que gozan de un tipo de interés razonable (por debajo del 1%) y periodos de pago a largo plazo. De lo contrario, defendieron entonces en la Villa, no habría oxígeno para el Ayuntamiento.

Tarifa aumenta su endeudamiento al lograr un préstamo para pagar la Seguridad Social pendiente

En Tarifa, la deuda viva ha pasado de 7 millones a 39,8. Esos 32 millones de diferencia al alza se explican por el crédito de casi 33 millones de euros concedido para pagar a la Seguridad Social y los intereses devengados. Por lo tanto ahora la deuda de Tarifa no se mantiene con la Seguridad Social, que imponía intereses coercitivos, sino con un banco y a diez años, con dos de carencia.

En Jimena la deuda viva pasó de 3,8 millones a 2,5, un 35,4% menos, mientras que en Castellar el crédito bancario pendiente pasó de 568.000 euros a 284.000, exactamente la mitad.

La Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar también es computada por el Ministerio de Hacienda. En este caso, la política de reestructuración de la deuda ha llevado a pasar de 34,9 millones de euros a finales de 2014 a 24,2 millones en 2018. Son 10 millones de euros menos (un 30,7% de descenso) de los que 4,3 se amortizaron en el último año.