El grupo ecologista Agaden ha reclamado a la dirección del parque natural del Estrecho que actúe contra una serie de parcelas en las que se acumulan chatarras o construcciones en precario por suponer una agresión al entorno protegido entre Tarifa y Valdevaqueros.

Los conservacionistas hacen referencia un chiringuito, una zona parcelada con sombra, un parque para la práctica de paintball y varios aparcamientos irregulares. Las cuatro irregularidades han sido denunciadas ante la dirección del parque, que ha respondido a los conservacionistas asegurando que, en la mayoría de los casos, se ha ordenado la retirada. Así, sobre la instalación de un chiringuito la dirección del parque constata que carece de licencia y que se asienta sobre dominio público, además de verter aguas sin depurar, por lo que se ha abierto -informa la carta recibida por Agaden- un expediente sancionador.

Otro caso hace referencia a un circuito de aventura para la práctica del paintball frente a un camping. Los ecologistas denunciaron que se encuentra formado por una furgoneta y varios neumáticos. La dirección del parque resalta que aunque la actividad podría resultar legalizable, los elementos empleados no son adecuados por tratarse de material contaminante y peligroso, por lo que ha instado al propietario a su retirada inmediata bajo amenaza de sanción.

Agaden también denunció varios aparcamientos irregulares sobre los que la Junta reconoce que sólo se puede actuar de forma disuasoria, puesto que la mayoría de las ocupaciones (acampada y aparcamiento) son temporales. Por último, el grupo ecologista denunció otra parcelación cerca de otro camping en la que se instaló una zona de sombra, una depuradora y un vehículo que también ha sido sancionado por Medio Ambiente.

El colectivo resaltó que las denuncias buscan evitar la proliferación, por inacción, de asentamientos sobre suelo protegido que devalúen la calidad del parque natural.