La Real Balompédica Linense ha empatado sin goles con el Almería B en un Municipal cuya capacidad ha quedado reducida a la grada de Preferencia por primera vez en su historia. Con este resultado los albinegros encadenan su quinta jornada sin ganar y aparecen en la octava plaza de la clasificación, a cinco puntos del cuarto clasificado y con once de renta sobre el Villanovense de Julio Cobos, que ocupa la plaza de promoción.

Lo único positivo del encuentro fue el emotivo homenaje al exdelantero Francisco Pavón Orihuela Paquito, quien no pudo contener las lágrimas cuando oía los aplausos que le tributaron los aficionados. El exfutbolista de San Fernando no estuvo acompañado durante el acto en el terreno de juego por el presidente, Raffaele Pandalone.

El duelo entre Balona y Almería B quedó reducido a una jugada. En el minuto tres un centro de Juampe fue cabeceado por Gato y el árbitro, el granadino Juan Manuel Ruiz Aguilera, anuló el tanto por fuera de juego. Una decisión cuando menos, dudosa.

A partir de ese momento lo que se vio sobre el terreno de juego no merece ser llamado partido de fútbol. El balón iba de uno a otro lado sin dirección y ni los locales ni los visitantes eran capaces de crear ocasiones de gol. 

El público despidió, por primera vez en lo que va de temporada, con gritos cargados de reproches a los jugadores de casa.

En breve, una información más detallada de lo sucedido en el terreno de juego con reflexiones de los protagonistas en la web de Europa Sur y mañana, en la edición de papel.

Por si fuera poco, los aproximadamente 1.200 espectadores que acudieron al Municipal tuvieron que soportar una temperatura especialmente fría, con molesto viento de Poniente, que cuestiona y mucho la decisión de la directiva de no fijar el encuentro, como los dos anteriores, al mediodía.