Familiares de paliativos rechazan el cierre de la antigua Cruz Roja en verano

Familiares de enfermos de la unidad de cuidados paliativos del centro de la antigua Cruz Roja están recogiendo firmas de apoyo para que no se cierre dicho centro durante los meses de julio, agosto y septiembre. El área sanitaria del Campo de Gibraltar ha confirmado que durante estos tres meses enfermos que así lo precisen serán trasladados al Hospital Punta de Europa para ser atendidos por el mismo personal. Los otros, serán remitidos a sus casas para ser atendidos por la unidad de cuidados paliativos a domicilio.

Esta medida cuenta, sin embargo, con la oposición de los familiares que han manifestado que se negarán a firmar cualquier parte alta y a que los enfermemos abandonen el centro. "Es darles la muerte a estos enfermos", indicó como portavoz, Francisco del Valle. De momento, una vez que dispongan del apoyo suficiente, remitirán las firmas junto a un escrito al gerente del área sanitaria y al subdelegado del gobierno de la Junta de Andalucía.

"Nos encontramos ante una situación muy crítica porque se trata de enfermos terminales que necesitan unos cuidados especiales". A pesar de que se les vaya a atender en el hospital, temen que pueda no haber plazas suficientes y que la atención no será la misma ni habrá el mismo protocolo si un paciente está en su domicilio y precisa ser ingresado de urgencia. Valle explicó que actualmente hay 16 pacientes.

Los familiares opinan que en el hospital no tendrán la "atención perfecta y extraordinaria que están haciendo aquí". En este sentido, tuvieron palabras de agradecimiento a la labor que llevan a cabo los profesionales del servicio de paliativos. Una de las usuarias tiene a su madre hospitalizada y ante esta situación ha decidido movilizarse. A las doce del mediodía ya habían recogido más de 200 firmas en la ciudad.

Valle también quiso destacar la labor que se realiza en la atención a domicilio, que se extiende por toda la comarca. "Esto no nos lo pueden quitar". De hecho, otro de los familiares indicó que a pesar del buen trabajo de estas personas, si trasladan a algunos enfermos a sus casas, la atención tampoco será la misma como si estuvieran en el hospital porque los profesionales tienen ya que atender a otras personas en todo el Campo de Gibraltar. Ellos lo que quieren es que en los últimos días o tiempo que les queda de vida, sufran lo menos posible.

Una señora de avanzada edad, cuyo marido es terminal, asegura que ella está sola en su casa: "no puedo hacerme cargo de él. Lo que pedimos es un poco de calidad de vida. Que piensen que si tuvieran aquí a sus padres, sus hermanos o un hijo, no les gustaría estar en esa situación. Son los últimos días de vida y aquí tiene un poco de calidad de vida. Que no se la quiten".

Los familiares también se quejaron, y así lo indican en su escrito, de problemas de suministro de pañales, que después de varios días "llegaron ayer" o con los vasos o algunos batidos, e incluso aseguran que les piden a los familiares que traigan alguna medicina: "siempre hay algún médicamente que no tienen, y te lo piden", dijo otra señora, afectada. "Si les están recortando, demasiado hacen".

Añadieron que a partir del día 10 "ya no ingresan más enfermos". Estas denuncias fueron negadas por el SAS, que aseguró que no tiene conocimiento de problemas en los suministros y que, ningún familiar ha interpuesto ninguna reclamación. El SAS dijo que, aunque se cerrará el día 1, se irán dejando camas vacías de forma paulatina.