La Junta confirma que la pieza hallada en las obras de la antigua conservera de Tarifa carece de valor arqueológico

La delegación territorial de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía en Cádiz ha confirmado este martes que la pieza hallada en las obras que se llevan a cabo en la parcela ubicada entre las calles Arapiles y Numancia, donde se encontraba la antigua fábrica conservera La Tarifeña, en el término municipal de Tarifa, es un bloque de hormigón y no restos de interés arqueológico. Ante la denuncia llevada a cabo por el grupo Agaden en la tarde del domingo 29 de junio, técnicos de la delegación, así como agentes del Seprona, se personaron la pasada semana en la parcela en la que habría sido hallado "un bloque de piedra tallada y ahuecada" que, según el colectivo ecologista, “podría ser de interés arqueológico”.

Tras inspeccionar el hallazgo, tanto desde el Seprona como desde la delegación territorial constataron que la pieza es "de hormigón contemporáneo, pudiendo observarse en ella las ferrallas, por lo que se determina que la misma corresponde a la cimentación de un edificio anterior de época contemporánea".

"La parcela en la que se desarrollan las obras no se encuentra dentro del casco histórico ni es zona que tenga establecida cautelas arqueológicas, según el PGOU de Tarifa, y, por tanto, la misma no requiere de autorización previa de Cultura, estando únicamente sometida, como cualquier obra, al régimen de hallazgos casuales establecido en el artículo 50 de la Ley 14/2007, de 26 de noviembre, del Patrimonio Histórico de Andalucía", indica la delegación en un comunicado.

En esta ley se indica: “la aparición de hallazgos casuales de objetos y restos materiales que posean los valores propios del Patrimonio Histórico Andaluz deberá ser notificada inmediatamente a la Consejería competente en materia de patrimonio histórico o al Ayuntamiento correspondiente, quien dará traslado a dicha Consejería en el plazo de veinticuatro horas. En ningún caso se podrá proceder sin la autorización y supervisión previa de la Consejería competente en materia de patrimonio histórico a la remoción de los restos o bienes hallados, que deberán conservarse en el lugar del hallazgo, facilitándose su puesta a disposición de la Administración”.