Indignación ciudadana en Tarifa por el cierre indefinido de la piscina municipal desde abril

La piscina cubierta municipal de Tarifa lleva cerrada desde el 26 de abril. Tres meses después, la avería que provocó su clausura sigue sin resolverse y el Ayuntamiento aún no ha fijado una fecha concreta para su reapertura. La situación ha desatado la indignación de colectivos sociales, usuarios habituales y personal afectado, que denuncian la falta de urgencia política y la ausencia de soluciones provisionales. Este martes, 22 de julio, la Asociación de Fibromialgia de Tarifa (Afita) ha celebrado una concentración frente a las instalaciones clausuradas para reclamar una respuesta clara y efectiva.

La Plataforma Ciudadana Tarifa No Se Vende ha mostrado su apoyo a la protesta. En un comunicado, lamenta que una instalación “esencial para la salud de tantas personas” lleve cerrada durante meses “sin plazos claros, sin alternativas y sin urgencia política”. El colectivo recuerda que la piscina no es solo un espacio deportivo, sino un recurso terapéutico para personas mayores, con dolor crónico o con movilidad reducida, además de un lugar habitual de entrenamiento para muchos vecinos.

Como publicó Europa Sur, el origen del cierre se remonta al 25 de abril, cuando el personal técnico detectó un fallo grave en el sistema de deshumidificación. El exceso de cloro en suspensión y los niveles anormales de humedad ambiental provocaron una intoxicación que afectó a prácticamente toda la plantilla. Irritación ocular, sequedad en la garganta y problemas respiratorios llevaron al cierre inmediato de la instalación, al día siguiente, por motivos de salud y seguridad.

Desde entonces, las reparaciones han sido lentas y complejas. Según ha informado el Ayuntamiento en distintas comunicaciones, se han sustituido válvulas, tubos deteriorados, se ha instalado un nuevo colector de climatización y se han realizado pruebas con placas electrónicas de control. Sin embargo, el núcleo del problema sigue siendo la maquinaria obsoleta: la deshumectadora, con más de 25 años de antigüedad, no puede garantizar un funcionamiento estable ni seguro.

El pasado 17 de julio, el Consistorio explicó que una nueva avería detectada durante las pruebas impide aún fijar una fecha de reapertura. Asegura que solo se permitirá el acceso cuando se cumplan todos los requisitos legales y sanitarios. Paralelamente, el área de Deportes trabaja en una modificación presupuestaria para adquirir una nueva máquina y renovar progresivamente las instalaciones.

Pero para los colectivos afectados, las explicaciones no son suficientes. “Más allá de la complejidad técnica, lo que preocupa es la falta de prioridad”, denuncia Tarifa No Se Vende. “No se ha hecho lo suficiente por acelerar la solución, tratándose de una instalación pública tan necesaria y ubicada, además, en una zona donde han proliferado propuestas para otros usos muy distintos”. En alusión a los debates recientes sobre reordenación urbanística en el entorno del paseo marítimo, la plataforma alerta del riesgo de que el interés turístico o especulativo acabe desplazando lo social del centro de la agenda.

Afita, por su parte, subraya la importancia de la piscina para el tratamiento físico de sus integrantes. Muchas personas con fibromialgia y otras enfermedades crónicas no tienen acceso a terapias similares en ningún otro espacio municipal. La concentración de este martes ha intentado visibilizar una realidad que consideran silenciada: “cuando un espacio público se paraliza, no solo se interrumpe una actividad; se rompe algo más profundo en la vida cotidiana de quienes más lo necesitan”.

El malestar va en aumento. Los usuarios denuncian la falta de transparencia y la escasa comunicación. Critican que buena parte de la información sobre el estado de la piscina ha llegado solo a través de mensajes breves o por redes sociales. Tampoco se han ofrecido alternativas de acceso a otros servicios deportivos ni compensaciones por los abonos suspendidos.

“No todo puede depender del calendario turístico o del interés puntual del momento”, advierte la plataforma ciudadana. “Una Tarifa justa se construye desde lo público, con planificación, con inversión y con respeto a quienes aquí viven todo el año”, concluyen.

Respuesta del Ayuntamiento

La concejala de Deportes de Tarifa, Celia Rico, ha trasladado a los medios de comunicación que el Consistorio tarifeño se encuentra trabajando "desde el minuto cero" para conseguir la reapertura de la piscina municipal. Rico ha insistido que las demoras para volver a poner en funcionamiento el servicio municipal no se deben a cuestiones económicas, sino que, "son cuestiones que escapan a la administración local".

Según la concejala, se trata de una "cuestión de tiempo" y a la adaptación de las averías "que van saliendo", aludiendo también a la dificultad de encontrar "piezas" y a nuevos incidentes que han hallado conforme se trabajaban distintos tramos de la actuación para la reparación de la piscina. "Es una cosa que se va de nuestras manos", ha indicado Rico, que ha finalizado disculpándose, pues "no puedo decir fecha de apertura".